La Policía ugandesa arrestó anoche a 44 personas después de que sus agentes irrumpiesen en un refugio clandestino de la comunidad LGTBIQ+, confirmaron hoy defensores de los derechos de este colectivo en Uganda.

“Todas las personas arrestadas están en custodia policial a pesar de que las autoridades no les han imputado ningún cargo”, denuncia el activista y director de la organización Minorías Sexuales de Uganda (SMUG, por sus siglas en inglés), Frank Mugisha. “La Policía todavía está interrogando a los detenidos”, añade.

Según Mugisha, las autoridades allanaron un refugio de personas LGTBIQ+ (lesbianas, gais, bisexuales, transgénero, transexuales, travestis, intersexuales y queers), después de que varios vecinos sospechasen que en ese lugar estaban a punto de celebrarse “bodas gays”.

Se trataba de una casa particular de Kampala, la capital ugandesa, que usaba esta comunidad como escondite tras soportar toda clase de persecuciones homofóbicas.

El código penal de Uganda mantiene una ley del período colonial británico, publicada por primera vez en 1950, que penaliza con siete años de cárcel las relaciones íntimas con personas del mismo sexo.

Además, los mensajes homofóbicos tienen una huella profunda en la sociedad ugandesa, debido sobre todo a la influencia de los predicadores evangelistas y varios políticos prominentes y medios de comunicación relacionados con ellos.

"Las iglesias evangelistas cambiaron Uganda", señala un activista LGTBIQ+ que prefiere ocultar su identidad. "A partir del 2009, muchos perdimos nuestros trabajos, hogares o familias", añade.

Durante los últimos años, SMUG, así como otras organizaciones que luchan por los derechos de la comunidad LGTBIQ+ en Uganda, denunciaron arrestos arbitrarios, ataques violentos, torturas, amenazas, despidos, desalojos forzados, discriminaciones familiares, negación al acceso a servicios sanitarios, entre otros abusos.

"Desafortunadamente, los ataques en contra de la comunidad LGTBIQ+ no son nuevos en Uganda", lamentó Mugisha.