- El líder de la oposición en el Reino Unido, el laborista Keir Starmer, se declaró “amargamente decepcionado” con los primeros resultados declarados en las elecciones locales y regionales británicas. “Hemos perdido la confianza de la gente trabajadora”, afirmó a la BBC Starmer, que asumió “toda la responsabilidad” por los comicios y aseguró que hará “todo lo que sea necesario para arreglar” la situación del partido.

“Me hago responsable de recomponer las cosas”, puntualizo el líder laborista, que avanzó que “en los próximos días” anunciará los “cambios” que considera necesarios.

En las locales y regionales del jueves, el primer partido de la oposición en el Reino Unido perdió el escaño parlamentario de Hartlepool, un asiento en manos laboristas desde que se creó la circunscripción, en 1974.

Esa derrota no cambia el equilibrio en la Cámara de los Comunes, pero representa una importante victoria simbólica para los conservadores, que confirman su avance en los feudos tradicionalmente laboristas que ya se observó en las últimas generales.

Con el resultado declarado en 42 de las 143 autoridades locales en liza en Inglaterra, los conservadores ganaron 97 concejales más de los que tenían hasta ahora, mientras que los laboristas perdieron a 122, según el recuento provisional.

En el Parlamento autónomo de Escocia, con 18 escaños decididos, el Partido Nacional Escocés (SNP) suma ya quince, uno más que hasta ahora en las circunscripciones declaradas, tres los Liberal Demócratas y ninguno los laboristas, que pierden un asiento.

“No hemos presentado argumentos lo suficientemente sólidos al país. En muchas ocasiones hemos estado hablando hacia nosotros mismos, en lugar de hacia el país”, analizó Starmer sobre el retroceso electoral.

“Voy a establecer aquello que es necesario hacer para reconectar al Partido Laborista con los votantes, que el jueves expresaron su veredicto sobre nosotros, particularmente en lugares como Hartlepool”, agregó Starmer.