La junta militar de Birmania (Myanmar) ultima una ley de ciberseguridad que le permitirá interrumpir temporalmente internet, prohibir contenidos y reclamar datos de usuarios, cuando continúan las detenciones a políticos tras el golpe de Estado. El intento de controlar internet llegó ayer en medio del sexto día de protestas consecutivas contra el levantamiento militar que acabó con el Gobierno electo de Aung San Suu Kyi. En la imagen, un manifestante pisa fotografías del jefe de la junta militar, el general Min Aung Hlaing, en Naypyitaw.