- La dirigente opositora bielorrusa María Kolesnikova, que permanece detenida en régimen de prisión preventiva, presentó ayer una denuncia por amenazas y secuestro contra los agentes que la capturaron el 7 de septiembre, hasta que fue arrestada un día después cuando rompió su pasaporte para evitar su expulsión a Ucrania. Según denunció, varios desconocidos le sometieron a “presión psicológica, amenazas de muerte y a un intento de expulsión de Bielorrusia”. En su denuncia, Kolesnikova especificó el nombre y el cargo de las personas que ejercieron presión psicológica sobre ella y demandó la apertura de un expediente sancionador.