Francia superó este miércoles las 17.000 muertes por coronavirus, con 17.167 fallecimientos, pero, por primera vez desde el inicio de la pandemia en el país, bajó la presión en los hospitales.
En total siguen hospitalizadas 31.779 personas, pero el balance entre los ingresos y las altas fue negativo por primera vez desde el 1 de marzo, con 513 personas menos.
El director general de Sanidad, Jérôme Salomon, indicó en su rueda de prensa diaria sobre la evolución de la situación que hay que tomar esas cifras con prudencia, porque el número de ingresos se mantiene alto, con 2.415 nuevos en el último día.
También fue negativo el balance en las unidades de cuidados intensivos (UCI), en este caso por séptimo día consecutivo, con 273 pacientes menos y un total de 6.457 casos graves.
De las 17.167 muertes registradas desde el pasado 1 de marzo, 10.643 se produjeron en hospitales, de ellas 514 en las últimas 24 horas, y las otras 6.524 en residencias de ancianos y centros de dependencia, de las que el Ejecutivo va recibiendo los datos de forma paulatina.
Salomon precisó que en todo el territorio se han confirmado 106.206 casos de coronavirus, 2.633 más que la víspera, y que aunque se confirma la llegada a la "meseta epidémica", esta sigue siendo "muy alta".