Madrid. El Congreso ha dado hoy el primer paso para igualar los permisos de paternidad a los de maternidad hasta alcanzar las 16 semanas y que sean intransferibles y remunerados al cien por cien, tal y como ha planteado Podemos en una proposición de ley que ha recibido el respaldo unánime de todos los grupos.
La propuesta que el grupo confederal registró hace más de un año y medio ha recibido hoy el espaldarazo unánime del pleno, que ha apoyado su toma en consideración tras haber superado dos vetos del anterior Gobierno popular, ha recordado durante su defensa el líder de Unidos Podemos, Pablo Iglesias.
Y aunque "desgraciadamente" ha llegado tarde, ha dicho, su debate ha traído la oportunidad de demostrar que el Parlamento "ha echado al PP del Gobierno" y que a partir de ahora el "Congreso de los Diputados y las Diputadas manda".
La regulación actual obliga a la madre a tomar las seis primeras semanas y de forma voluntaria las diez siguientes; los padres tienen un permiso voluntario e intransferible de cuatro semanas desde el día de nacimiento, aunque en los Presupuestos de 2018 el PP y Ciudadanos pactaron ampliarlo a cinco semanas.
Unidos Podemos plantea que los progenitores tengan ese mismo permiso intransferible de 16 semanas para el cuidado de menores en casos de nacimiento, adopción o acogida divisibles en dos periodos distintos: el permiso parental inicial de dos semanas y el crianza de catorce.
El incremento del permiso de paternidad, según el texto, será gradual y paulatino de dos semanas al año durante cinco años una vez entre en vigor la ley.
"Me toca muy de cerca y lo quiero dejar bien claro: a mí no me toca ayudar a mi compañera a criar a nuestros hijos, a mí me toca compartir esas tareas al 50 %, y quiero que haya una ley que me obligue a hacerlo", ha subrayado Iglesias.
No solo porque ella tiene derecho a no ser discriminada laboralmente, sino porque sus hijos lo tienen también "a crecer en un entorno y estructura familiar que no sea sexista". "No basta con que los planes de estudios enseñen que todos somos iguales, deben vivirlo en su casa", ha añadido.
Iglesias ha querido agradecer a la sociedad civil esta propuesta, especialmente a su impulsora, la Plataforma por Permisos Iguales e Intransferibles de Nacimiento y Adopción (PPiiNA), que ha enviado a varios representantes al Congreso a presenciar el debate.
Y ha acabado recordando a las tres mujeres que le criaron -su madre, su abuela y su tía abuela-, que tuvieron que hacer "muchas renuncias" para ello.
"Los hombres de este país les debemos a nuestras madres y abuelas hacer por nuestros hijos aquello que ellas hicieron por nosotros", ha concluido.
Desde el PP, Carmen Dueñas ha asegurado que el anterior Ejecutivo siempre fue favorable a equiparar los permisos, pero considerando que debían ser sometidos a comisión y análisis del Pacto de Toledo.
No obstante, ha apoyado la proposición "en aras de la responsabilidad" porque desde la oposición quieren seguir trabajando por la igualdad, y ha invitado al PSOE "a que se ponga a trabajar y a que cumplan las promesas". "Promesas muchas, fotos muchas, pero a ver los hechos", ha zanjado.
La socialista Esther Peña ha señalado que la hoja de ruta de su Ejecutivo es "revertir la mirada perversa de PP y Ciudadanos" y quiere "mirar hacia delante" y poder vivir "en un país donde ser padre o madre no sea una cuestión imposible".
"El feminismo no es optativo, es obligatorio en democracia", ha sentenciado la diputada, para quien la igualdad es "cuestión de Estado" y la exige la Constitución y las calles.
Patricia Reyes, de Ciudadanos, ha incidido en que esta medida "es una prioridad, gobierne quien gobierne" y la respalda porque su grupo nunca hará uso del "no es no".
Según Ana María Surra, de ERC, "proveer a los niños y niñas de cuidados de sus padres es una inversión de primerísimo orden para aspirar a ser una sociedad moderna, avanzada e igualitaria".
Íñigo Barandiaran, del PNV, ha dado su visto bueno a la propuesta porque, como padre de dos hijas, quiere para ellas una "sociedad más justa e igualitaria".
Para Lourdes Ciuró, del PDeCAT, "hoy es un día feliz" porque siempre ha estado convencida de que los permisos debían ser iguales; Marta Sorlí, de Compromís, ha destacado que "nuestros hijos e hijas merecen ser cuidados tanto por su padre como por su madre" y Marian Beitialarrangoitia, de EH Bildu, ha apelado por cambiar el paradigma social porque el actual modelo de permisos es "patriarcal".