madrid - El camino no tiene vuelta atrás para Ciudadanos: Cristina Cifuentes tiene que dimitir. El presidente de la formación naranja, Albert Rivera, lanzó ayer el órdago y exigió al líder del PP, Mariano Rajoy, que releve a la presidenta madrileña si quieren acabar la legislatura en Madrid, mientras que los populares, que niegan que estén buscando un sustituto, pidieron a Ciudadanos que aclare si va a “apoyar directa o indirectamente” la moción de censura del PSOE avalada por Podemos. También el portavoz de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid, Ignacio Aguado, exhortó al PP a que nombre esta semana un candidato alternativo a Cifuentes, que esté “limpio” para gobernar en la Comunidad de Madrid en los próximos diez meses.

Ante esas exigencias, Rajoy se lavó las manos y, desde Argentina, donde se encuentra de viaje oficial, instó a Rivera a que explique su amenaza de hacer caer a la presidenta de la Comunidad, y confió en que este asunto se resuelva pronto en la Asamblea de Madrid entre los partidos y se haga “con el mayor sentido común posible”. “Yo, desde luego, ni amenazo ni advierto”, añadió Rajoy, sin querer entrar en el fondo del asunto y antes de señalar que este tema tiene su lugar “donde está residenciado”.

Aunque intentó escabullirse se le coló el último escándalo que afecta a uno de los dirigentes de su partido. El presidente del Gobierno español evitó apoyar expresamente a Cifuentes, e incluso fue más allá, al intentar desvincularse incluso de su propia formación: “Es un tema de los partidos”. En el PP creen que la situación está cada vez “peor”, por eso, opinan, Rajoy ha empezado a marcar distancias, sin embargo, de forma oficial niegan que el partido esté buscando un relevo a Cifuentes, un asunto con el que Ciudadanos intenta “intoxicar”, según señalan fuentes populares, en respuesta a lo señalado desde la cúpula de C’s. “C’s debería aclarar si va a apoyar directa o indirectamente la moción de censura con Podemos para quitar del Gobierno de la Comunidad de Madrid al PP que ganó las elecciones. Esa es la pregunta que se hacen todos los madrileños”, afirmó en Twitter el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo.

Mientras la dirección nacional asegura que no está en un proceso de sustitución de la presidenta y que está abierta al diálogo con Ciudadanos para buscar la estabilidad en el Gobierno regional, el número dos de Cifuentes, Ángel Garrido, principal candidato al puesto, ve “razonable” que Génova tome cartas en el asunto del máster ya que “causa una crisis” para el partido a nivel regional y nacional. El portavoz autonómico insistió en que Rajoy ha dado su “respaldo” a Cifuentes, “la última ocasión de forma pública durante la Convención Nacional del PP”. Un evento en el que la presidenta irritó a muchos de sus correligionarios al convertirse en protagonista cuando a su juicio la presidenta madrileña debería dimitir para no hacer más daño a su partido.

En las filas populares esperan que Rajoy dé la orden de dejar caer a Cifuentes o que salga adelante la moción de censura. Pero lo segundo no lo ven tan claro. Es preferible reemplazarla por otro dirigente del PP para mantener así el Gobierno regional. De la otra forma se corre el riesgo de que el socialista Ángel Gabilondo se consagre de aquí a un año y ya sea imposible echar al PSOE en las elecciones de 2019.

presión Tanto el PSOE como Podemos redoblaron la presión sobre Ciudadanos para que apoye la moción de censura presentada por los socialistas en la Asamblea de Madrid. El líder socialista, Pedro Sánchez, pidió a Albert Rivera, que apoye a Gabilondo y contribuya así a “cerrar la etapa negra de 25 años de gobierno del PP” en esa región. Por su parte, la portavoz de Unidos Podemos en el Congreso, Irene Montero, aseguró que le da “vergüenza” que el PP, al que no le queda “escapatoria”, pueda salir con toda tranquilidad a defender a Cifuentes gracias al apoyo de Ciudadanos, pese a que, para la diputada, es evidente que ha mentido.

En el caso de que Cifuentes, que en los últimos dos días no ha tenido agenda pública, dimitiese, la moción de censura decaería, como recordó Ángel Gabilondo. La clave puede estar en la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE), que informará hoy de la investigación abierta en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid (URJC) por el máster. El presidente de la CRUE, Roberto Fernández, y los dos observadores externos pueden dar la puntilla para Cifuentes. - DNA

Corrupción y política. El barómetro del CIS, elaborado entre el 1 y el 13 de marzo, refleja que no hay cambios en los principales puestos de la lista de preocupaciones de los encuestados, encabezada por el paro, con un 65,9% -cuatro décimas más que en febrero-, seguido de la corrupción, que baja más de cuatro puntos hasta el 34,5%. Le siguen los políticos y la clase política, mencionada en el 26% de las entrevistas, casi dos puntos más que el mes anterior, pero por debajo del récord del 28,5% de diciembre de 2017.