GASTEIZ. Esta novedad se recoge en el decreto del Departamento de Empleo y Políticas Sociales que ha pasado hoy por el Consejo de Gobierno, por el se aprueba el reglamento regulador del Registro de Parejas de Hecho de Euskadi.
Esta normativa modifica la anterior que data de 2004, con el objetivo de actualizarla y mejorar su funcionamiento.
Con esta modificación se reduce y clarifica la documentación que debe acompañar a las distintas solicitudes con el fin de acreditar el cumplimiento de los requisitos establecidos para constituirse como pareja de hecho o para cancelar la unión.
Así, se concretan con mayor precisión los distintos trámites que se deben llevar a cabo. Además, la regulación se dota de una mayor seguridad jurídica y se eliminan las lagunas que hasta ahora existían cuando concurren determinadas situaciones que el anterior decreto no contemplaba.
La mejora afecta a todas las parejas de hecho pero, en concreto, en el caso en el que una de sus integrantes sea víctima de violencia machista será el propio registro el encargado de informar a la otra persona de la decisión de cancelar la unión.
Hasta ahora la víctima estaba obligada a ponerse en contacto con su agresor para hacerle saber su deseo de acabar con la unión. Con esta regulación será el registro el encargado de intermediar y de hacer llegar esta demanda a la otra parte de la pareja.
El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha señalado a preguntas de los periodistas que lo que se hace es "facilitar" que en los supuestos de violencia machista la tramitación se lleve a cabo "de forma más liviana para las víctimas y que éstas no tengan que coincidir con sus agresores".
Además, con esta nueva regulación se reduce el plazo para que se extinga la unión cuando una de las partes es víctima de malos tratos, y pasa de tres a dos meses.
El decreto determina también con carácter general que cuando el miembro de la pareja que requiera su cancelación acredite que no localiza al otro será el propio registro el que trate de hacerlo y de comunicárselo.
Fuentes del Departamento de Beatriz Artolazabal han puesto como ejemplo a Efe la dificultad que encuentran algunos ciudadanos de hacer llegar su petición de disolución de unión a sus parejas cuando estás se van a vivir a otros países.
Además, han recordado que las cancelaciones de las uniones de hecho se producen con la petición de sólo una de las partes de la pareja y sin tener que alegar ninguna causa.
También se adapta a la normativa vigente porque a partir de ahora uno de los requisitos que debe acreditar la pareja que pretenda la inscripción en el registro vasco es que, al menos, uno de sus integrantes tenga vecindad civil vasca.
Este requerimiento implica estar empadronado y residir un mínimo de años en Euskadi.