GASTEIZ. La Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Logística, Transporte y Seguridad Vial (Formaster) ha dado hoy a conocer estos datos y ha expresado su preocupación por el incremento de los siniestros con heridos en Euskadi.
El caso más llamativo es el de Araba, donde los fallecidos en accidente de tráfico han bajado un 63 % desde 2006, pero los siniestros con heridos han aumentado un 105 %, el mayor incremento nacional.
En Araba se producen al año 28 accidentes por cada 10.000 habitantes, un ratio muy por encima de la media nacional, que se sitúa en 21 siniestros por 10.000 habitantes.
A este dato "preocupante" para Formaster se suma que anualmente más de 1.000 alaveses resultan heridos en accidentes de tráfico.
El 73 % de los siniestros en Álava se producen en vías urbanas, mientras el 7 % ocurren en carreteras convencionales y solo un 5 % en autovías o autopistas.
Otro de los datos destacados del estudio es el caso de Gipuzkoa donde el descenso de fallecidos en carretera es del9 % desde 2006, el más bajo de toda España, ya que de media la caída en todo el país es de casi el 60 %.
En Gipuzkoa también han subido los accidentes con heridos, pero de forma más moderada que en Álava, en un 33 %. El ratio es de 25 accidentes de tráfico con víctimas por cada 10.000 habitantes y más de 2.100 heridos al año.
El 52 % de los siniestros de Gipuzkoa ocurren en vías urbanas, el 11 % en carreteras y el 8 % en autovías o autopistas.
En Bizkaia el descenso del número de fallecidos en accidentes de tráfico es del 53% mientras que el aumento de los siniestros con heridos es el menor de Euskadi, un 15 % desde 2006.
Su ratio de siniestralidad es también el mejor de la CAV ya que se producen 16 accidentes de tráfico con víctimas por cada 10.000 habitantes y una media de más de 2.600 heridos al año.
También en Bizkaia el accidente más común sucede en vías urbanas (51 %), seguido de las carreteras convencionales (10 %) y de autovías o autopistas (7 %).
La conclusión de Formaster es que las medidas de seguridad, tanto activas como pasivas, que incorporan los vehículos han contribuido a reducir el número de fallecidos, pero no la percepción del riesgo, que hace que a mayor seguridad que percibe el conductor, mayores riesgos asume y esto conlleva más accidentes.
Por este motivo, propone mayor implicación de la sociedad, que las campañas de sensibilización también vayan encaminadas a bajar el número de accidentes en carretera, modernizar el parque automovilístico, mejorar las vías y mayor educación vial, entre otras medidas.