BILBAO. En una entrevista en Radio Euskadi, Retortillo ha adelantado que esta Semana Santa la Comunidad Autónoma vasca tendrá una ocupación que superará el 90 % en hoteles y casas rurales, lo que representa un incremento respecto al año pasado.

Ha explicado que el objetivo del Gobierno Vasco "es aflorar el fenómeno" de las viviendas de uso turístico para que todas terminen siendo registradas y ha avisado de que las no inscritas están funcionando "en situación de clandestinidad" o de ilegalidad, y "por tanto son acreedores de sanciones".

Desde la puesta en marcha del registro hace unos seis meses, en Euskadi hay inscritos casi 1.100 pisos de ese tipo, de los que unos 800 están ubicados en Gipuzkoa y, de ellos, unos 600 en Donostia.

Retortillo ha destacado que la mitad de los pisos turísticos registrados están funcionando en la capital guipuzcoana.

Ha advertido de que el Gobierno Vasco baraja la posibilidad de que haya casi la misma cantidad de pisos turísticos ilegales funcionando que los inscritos.

Por otra parte, ha destacado el esfuerzo de su departamento por lograr que Euskadi sea considerado un destino turístico con buen tiempo, así como orientar este sector hacia "un turismo sostenible", aunque ha dicho que es "exagerado" el debate sobre las consecuencias negativas de esa actividad en el resto de la sociedad vasca.

"Ese discurso negativo hay que pararlo, aunque tampoco es una actividad que puede dejarse a su libre desarrollo", según el consejero, quién ha apostado por buscar "un turismo de excelencia" que garantice buenas condiciones laborales en el sector.

Ha aclarado que la ley permite al comercio pequeño abrir festivos en las tres capitales, "pero en Bilbao no hay costumbre".

A su juicio, cuando los comerciantes "vean que tienen una oportunidad de negocio abrirán" y atenderán así al turismo de ocio, además del de congresos, que cada vez llega en mayor proporción a la capital vizcaína.