BILBAO. La consejera vasca de Educación, Cristina Uriarte, junto con la viceconsejera del departamento, Maite Alonso, y el jefe de la Inspección, José Antonio Romero, han ofrecido hoy en rueda de prensa los datos de la evolución que ha experimentado el acoso escolar durante el pasado curso.
Las cifras constatan el "gran salto" que se ha producido, tanto en el número de casos analizados (de 268 en 2014-15 a 487 el pasado curso), que sigue a un incremento paulatino desde 2008, como en los que se confirmaron como acoso (121 frente a 67 del curso anterior).
Esto "no significa" que el acoso se haya incrementado en esa medida sino que los equipos de inspección, los centros educativos, las propias familias y también el alumnado ha reducido el "listón de tolerancia" y acciones a las que antes no se les daba importancia y ahora son incluidas en este apartado, ha explicado Uriarte.
El 61 % se ha producido en el ámbito de la Enseñanza Secundaria aunque entre los 6 y los 11 años se han registrado 47 casos.
Este problema se produce prácticamente en igual cantidad en centros concertados y públicos, aunque en algo mayor medida en estos últimos, y también son más frecuentes entre los chicos que entre las chicas, ha agregado.
Respecto a la modalidad, la agresión verbal es la más repetida (43 %), seguida de la exclusión y marginación social (25 %), las agresiones físicas (16 %), la intimidación, el chantaje o la amenaza (11 %), mientras menos del 1 % corresponde a abuso sexual.
Esta clasificación refleja el "elemento predominante" ya que la mayoría de las víctimas "sufre varias manifestaciones" de acoso, ha explicado Romero, quien ha indicado que las agresiones físicas van en descenso pero aumentan los insultos, la marginación y el ciberacoso.
A la hora de dar salida al problema se recurre "cada vez menos" a que el acosado salga del centro, ha indicado Romero, quien ha insistido en que "son pocos" los alumnos que optan por esta alternativa.
La solución "debe encontrarse en el propio centro escolar", ha señalado Romero, que ha agregado que el departamento cuenta con un grupo de inspectores "específicos" para gestionar estos asuntos.
Ha incidido en que todos los casos analizados, incluso los que no son considerados como una intimidación, tienen un "seguimiento" también en los cursos posteriores a los que ha tenido lugar, en virtud del protocolo creado por el Gobierno vasco en 2004.
El trabajo de prevención se verá reforzado con un Plan de Acoso Escolar que la consejería de Educación espera tener listo para final de este año y para el que se ha constituido un equipo de profesionales de la Universidad del País Vasco.
La iniciativa pretende impulsar intervenciones tanto a nivel grupal en las aulas como con los alumnos de forma individual, así como con profesores y familias.
Uriarte ha animado además a utilizar el teléfono Zeuk Esan, (116 111) que pone en contacto a los afectados con psicólogos especializados.
Desde hace tres cursos, personal del departamento de Seguridad informa a la comunidad educativa sobre temas que preocupan a la sociedad, una colaboración por la que durante el curso pasado 26.675 alumnos recibieron asesoramiento, 9.000 más que año anterior.
La reunión que más interés suscitó fue la dedicada a los peligros relacionados con Internet (13.700 estudiantes) y en segundo lugar la dedicada al acoso escolar (5.300).