BILBAO. A principios de este año, la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Bizkaia aceptó la petición de la letrada Jone Goirizelaia, representante legal de la familia Cabacas, para que se llamara a declarar como testigos a dos agentes de la Ertzaintza de paisano que se encontraban en el lugar de los hechos la noche del 5 de abril de 2012, cuando ocurrieron los hechos.
En una entrevista concedida a ETB-1, recogida por Europa Press, Calparsoro se ha referido al caso, que se investiga desde hace casi cinco años, y ha afirmado que "es un proceso difícil y complejo, y existen algunos obstáculos" para concluirlo.
Tras recordar que en la causa hay seis ertzainas imputados "y las víctimas, los padres y familiares de Iñigo, están sufriendo", ha apuntado que sus instrucciones al fiscal del caso "han sido claras" en el sentido de que hay que llegar "hasta el final en un corto período de tiempo".
En este sentido, ha recordado que hace escasos días dijo en el Parlamento Vasco que se sentía "frustrado" con este tema. "Pero es inevitable porque el caso no se está esclareciendo de la manera más gil, hay obstáculos y es un caso difícil. Ha muerto una persona y eso es muy grave", ha manifestado.
Por último, ha dicho que espera que la investigación concluya "en un plazo corto de tiempo" para apuntar que desconoce si se va a celebrar juicio finalmente. En todo caso, ha recordado que todavía es posible que se realicen más pruebas.