MADRID. Aunque algunos diputados críticos con el actual sector oficial se han molestado en los últimos días por la advertencia que recibieron por escrito sobre que la asistencia al acto era "inexcusable", todos ellos, incluidos los 'sanchistas' más combativos, han participado en el homenaje.
"Desde el punto de vista socialista apoyo la ley de dependencia, pero no me gusta que se utilice una ley socialista para otras cuestiones", se ha quejado la independiente Zaida Cantera a su llegada al acto junto al exalcalde de Donostia Odón Elorza, con quien esta tarde participará en Valladolid en la presentación de una nueva plataforma de militantes que reclaman la convocatoria ya de las primarias.
La dirección del grupo pide que el acto de hoy no se interprete en "clave interna", porque en el PSOE un expresidente está "por encima de cualquier otro planteamiento", pero los críticos con la gestora no dudan de que la "exaltación" de la figura de Zapatero está vinculada a una posible candidatura de la presidenta andaluza a la secretaria general del PSOE.
"Ahora no estoy en los temas orgánicos", ha afirmado el expresidente, que ha protagonizado cuatro actos en diez días, tras dos años de contadas apariciones públicas durante el mandato de Pedro Sánchez.
Hoy Zapatero ha estado flanqueado en el Congreso por el presidente de la gestora, Javier Fernández -cuya "prudencia" ha resaltado y a quien se ha referido como un "amigo" desde hace muchos años-, por su portavoz, Mario Jiménez, por Antonio Hernando y Miguel Ángel Heredia, por los exministros Trinidad Jiménez y Jesús Caldera y por el eurodiputado Ramón Jaúregui, que ha negado rotundo que él pueda encabezar una "tercera vía".
El expresidente ha avalado el discurso oficial de que "todo se gana o se pierde en el parlamento" y de que el trabajo parlamentario es lo que puede devolver al PSOE la credibilidad perdida.
"Yo también estuve en la oposición y la clave no es el número (de diputados), sino el empeño, la convicción y la capacidad de iniciativa", ha animado Zapatero a los suyos.
Si el viernes pasado el expresidente proclamaba que Susana Díaz representa "la fuerza del PSOE y de ganar", en uno de los múltiples actos promovidos por el PSOE andaluz para celebrar el décimo aniversario de la ley de dependencia, el sábado la conmemoración corría a cargo de Javier Lambán en Aragón.
Hoy los festejos han continuado y, entre el eco de las voces que abogan ya por una candidatura única, Zapatero no ha negado su "optimismo irrenunciable".