Bilbao - El PNV encara los próximos comicios del 26-J con un eje básico en su campaña: marcar la diferencia con respecto a la actuación política que en estos seis meses -los que han transcurrido desde las elecciones del 20 de diciembre- han mantenido el resto de formaciones y, en especial, los cuatro grandes partidos del Estado. Así lo manifestó ayer el presidente del Euzkadi Buru Batzar, Andoni Ortuzar, en el acto de presentación del lema de la formación jeltzale para estos comicios. Acompañado del resto de miembros de la dirección del PNV y con la presencia también del lehendakari, Iñigo Urkullu, y Aitor Esteban, portavoz del Grupo Vasco en el Congreso y cabeza de lista por Bizkaia, Ortuzar aseguró que al lema utilizado el pasado 20-D: Lehenik Euskadi Es lo que importa importa, se ha añadido la frase Marca la diferencia. Eutsi geureari, porque es precisamente lo que pretende el partido de Sabin Etxea, marcar la diferencia con el resto de formaciones. Una diferencia que, a juicio de Ortuzar, podrá quedar clara el próximo 26-J “votando en rojo, verde y blanco, votando en clave de Euskadi”.

Según aseguró, cada voto que obtenga su partido tendrá un valor doble, ya que por un lado servirá para defender los intereses de Euskadi en Madrid y, por otro, será también útil para que cambie la forma de gobernar en el Estado. En este sentido, el presidente del EBB recordó lo sucedido en estos últimos meses, una actuación política que, a su entender, solo ha servido para demostrar la incapacidad de diálogo de los grandes partidos, lo que ha abocado a la repetición de los comicios. “Desde el 20-D han pasado muchas cosas en el panorama político estatal, y todas malas: incomunicación, desencuentro, líneas rojas, personalismos, egocentrismos... Como consecuencia de todas estas actitudes tenemos una repetición electoral de difícil justificación”, aseguró Ortuzar, que insistió en que esas cuatro grandes formaciones estatales -PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos- “no han pensado ni en Euskadi ni en la gente”, por lo que recomendó a los vascos que “esta vez piensen en Euskadi y en ellos mismos”.

Ante este panorama, quiso dejar claro que lo que no ha cambiado en este periodo de tiempo es el compromiso de su formación con las prioridades de los vascos, por lo que ahora, al igual que el 20-D, el PNV quiere llevar a Madrid lo que se ha denominado la agenda vasca en el proceso de conformación de un nuevo Ejecutivo en el Estado español. Por eso, hizo un llamamiento a la ciudadanía vasca para que vean en el PNV el voto útil capaz de defender los intereses de Euskadi en Madrid: “Para el PNV la prioridad siguen siendo los vascos y las vascas, la defensa de los intereses vascos y la mejora de nuestra calidad de vida. Los vascos tenemos la opción de marcar diferencias”.

Agenda vasca La declaración de Ortuzar vino a corroborar lo consignado por Aitor Esteban en una entrevista concedida a RNE, en la que el cabeza lista jeltzale por Bizkaia aseguró que si su formación resulta decisiva tras el 26 de junio se asegurará de que la agenda vasca esté presente en todas las negociaciones. A diferencia de lo sucedido en los meses previos, en los que los partidos estatales llenaron de líneas rojas y condiciones previas las negociaciones, Esteban aseguró que el PNV está dispuesto, como lo ha estado siempre, a “hablar con todos sin líneas rojas”, y añadió que el “posicionamiento del PNV tras las elecciones dependerá de los planteamientos que se hagan en el ámbito económico, social y de infraestructuras y también en lo que se refiere al autogobierno y a la paz y convivencia”.

Según el dirigente jeltzale, en Sabin Etxea son partidarios de que “gobierne aquél que suscite las mayorías suficientes para hacerlo” y, por ello, invitó a “dejar a un lado la zona de división e intentar lograr acuerdos quizás más en precario, pero centrado en lo que une y no en lo que separa”. Aunque insistió en que el PNV no cierra la puerta a las negociaciones ni veta de entrada ningún acuerdo, considera difícil llegar a un pacto con PP y Ciudadanos si ambas formaciones no dan un giro de 180 grados en sus planteamientos. “Habría muchos obstáculos que salvar y haría falta un giro de 180º en esas formaciones para que nos pudiéramos poner de acuerdo en algo básico”, aseguró.

Esteban se refirió también a la decisión de las bases de EH Bildu de nombrar a Arnaldo Otegi su candidato a lehendakari de cara a los comicios autonómicos del próximo otoño. A su juicio, sería “un error” intentar impedirlo porque sería una decisión que podría “dar votos” a la izquierda aber-tzale y “activar un voto que tampoco está muy entusiasmado”. Por ello, a su entender, “no sería bueno para la democracia” que Otegi, “que es mas pasado que futuro”, no se pudiera presentar.