MADRID. La campaña para recuperar la ciudad de Palmira de manos de Estado Islámico ha terminado este domingo con éxito, según han informado tanto los medios oficiales como el grupo activista Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.

El Observatorio ha puntualizado que todavía hay escaramuzas en el este de la ciudad pero ha confirmado que la mayor parte de las fuerzas de Estado Islámico se han retirado hacia posiciones defensivas en el este del país.

La reconquista de la ciudad supone la recuperación de un punto estratégico para acceder al bastión islamista de Raqqa -la capital del autoproclamado califato- y de un Patrimonio de la Humanidad que ha resultado gravemente dañado tras varios meses de combates y por la campaña de desecración de lugares históricos efectuada por los yihadistas.

Estado Islámico asumió el control de la ciudad en mayo del año pasado, durante el apogeo de su ofensiva en Siria, y hasta la declaración el mes pasado del alto el fuego las fuerzas del Gobierno sirio habían sido incapaces de organizar una ofensiva para retomar la ciudad.

En la reconquista de Palmira han participado fuerzas militares sirias, grupos paramilitares de élite denominados los Halcones del Desierto y la aviación rusa, que ha desencadenado decenas de bombardeos sobre posiciones yihadistas, y que se han cobrado las vidas de más de un centenar de combatientes de Estado Islámico en las últimas 24 horas.

El director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, Rami Abdulrramán, ha estimado que unos 400 yihadistas han muerto en total durante los combates, en lo que se trata de "la mayor derrota del grupo desde la declaración de su califato en Siria e Irak hace dos años", según comentarios a la agencia Reuters.

RECONSTRUCCIÓN

El Gobierno sirio se ha comprometido a reconstruir los antiguos tiempos romanos de la ciudad de Palmira que Estado Islámico ha destruido, según ha afirmado el director del departamento de Antigüedades de Siria, Mamun Abdelkarim. "La resurrección de estos monumentos será un mensaje contra el terrorismo", declaró Abdelkarim.

Frente a él se encuentra la tarea de intentar rescatar lo que queda de los templos de Baal Shamin y de Bel, así como el arco triunfal de la ciudad, que ha permanecido en pie desde hace 1.800 años hasta la llegada de los yihadistas, y que Naciones Unidas describió como un crisol de culturas desde el amanecer de la Humanidad.

Sin embargo, y a pesar del gravísimo daño causado por Estado Islámico, Abdelkarim ha accedido a imágenes tomadas por aviones no tripulados que demuestran que partes antiguas de la ciudad todavía siguen en pie, como el anfiteatro o la plataforma de columnas conocida como el tetrapilón. "Reconstruiremos con las piedras que todavía siguen en pie. Vamos a devolver la vida a Palmira", ha declarado.