Los partidos estatalistas organizan el desembarco en Euskadi de sus líderes

Son sus elecciones, aquellas en las que los partidos de ámbito estatal juegan a una sola apuesta: colocar a su líder máximo en La Moncloa, en una suerte de competición presidencialista que no se corresponde con la realidad, que es la elección de 350 diputados, 18 de los cuales proceden de los tres herrialdes de la CAV. Las filiales en Euskadi de estas formaciones se han beneficiado históricamente del tirón de sus candidatos a presidente del Gobierno español. Es la diferencia con los fuerzas políticas vascas, que plantean sus campañas únicamente con sus candidatos territoriales, arropados por líderes de la casa y con unas agendas más centradas en intereses propiamente vascos.

Son unos comicios, además, en los que el culto a la personalidad de cada uno de los candidatos, especialmente de quienes se estrenan -Sánchez, Iglesias y Rivera-, los que aspiran a desbancar a Rajoy, se ha visto exacerbado por su constante exposición mediática en busca del último voto.

No es novedad que el socialista Pedro Sánchez visite Euskadi. Lo hizo durante los comicios de mayo y también fuera de campaña electoral. La buena relación que mantiene con la secretaria general del PSE, Idoia Mendia, y el conjunto del socialismo vasco, que le apoyó durante las primarias del año pasado que le llevaron a liderar el partido, ha convertido en frecuente su intervención en actos de los socialistas en Euskadi. Esta alianza no se ha roto aunque las encuestas dibujan un negro panorama que aventura que Sánchez no debe esperar grandes alegrías en Euskadi. El Sociómetro de octubre, por ejemplo, pronosticaba que el PSE perdería el 20-D dos de los cuatro diputados que tenía.

Aunque fuentes del partido no pudieron precisar la fecha concreta, se da por seguro que el candidato del PSOE visitará, mediada la campaña, dos territorios en una sola jornada, en la que protagonizará varios actos. No está descartado que Sánchez pueda repetir, incluso, un segundo día de campaña con el PSE.

Otro candidato habitual por estos lares en campaña electoral es Mariano Rajoy, que en las últimas citas con las urnas ha hecho hueco en su agenda para apoyar a los candidatos vascos del PP. Los populares vascos confían en que repita en Euskadi durante esta campaña, aunque aún no hay nada confirmado, según se informa en el partido. Su presencia en algún mitin con Alfonso Alonso, que además repite como cabeza de cartel por Araba, tendría una lectura de espaldarazo al recambio que aupó al ministro de Sanidad al frente del partido en Euskadi tras la sonada dimisión de Arantza Quiroga. Rajoy también encontrará a su filial en la CAV de capa caída. El Sociómetro vasco de octubre auguraba que el PP perdía uno de los tres diputados con los que contaba hasta ahora.

tándem Iglesias-Errejón Una situación diametralmente opuesta a la que vive Podemos en Euskadi, que según esta misma encuesta podría convertirse en la tercera fuerza de la comunidad, solo por detrás PNV y EH Bildu, y la primera entre las formaciones estatalistas, con cuatro diputados. La formación morada sacará todo su arsenal después del grave desencuentro que mantuvieron Pablo Iglesias e Iñigo Errejón con el dimitido dirigente en Euskadi, Roberto Uriarte, y la mayor parte de la dirección vasca. En su despedida reprocharon la “escasa atención” que la dirección en Madrid había prestado a Podemos en Euskadi, un territorio que nunca han hollado, ni en campaña ni fuera de ella, ni el líder del partido ni su número dos.

Iglesias pondrá fin a este desinterés con su presencia en la recta final de campaña, el día 14, en un mitin en Bilbao en el que estará secundado por Errejón, quien además repetirá en una fecha aún no confirmada en otro acto, también en Bizkaia. El desembarco de los pesos pesados del partido en el territorio vizcaino tiene como objetivo suturar las heridas abiertas por la dimisión de Uriarte y dar espaldarazo al candidato Eduardo Maura, una figura cuestionada por el sector que dejó la dirección de Podemos Euskadi de manera traumática.

revulsivo rivera La ola en la que está encaramado el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, parece que no tiene fuerza suficiente en Euskadi, donde se ha destacado por ser la única formación en pedir la derogación del Concierto vasco. Mientras los sondeos colocan a C’s como tercera fuerza en el conjunto del Estado, una marca que habría superado en varias encuestas, solo los más optimistas esperan que la formación pueda obtener algún diputado por las circunscripciones vascas. Por eso esperan en el partido que la presencia de Rivera el 16 de diciembre en Gasteiz sea un revulsivo para su potencial electorado.

La elección de Gasteiz no es casualidad. En Araba, Ciudadanos obtuvo los mejores resultados en las elecciones forales de mayo, con su primer representante en Juntas Generales. Pese a los escasos votos que le puede reportar el electorado vasco, Rivera hará en Euskadi un alto en el camino de su intensa campaña en caladeros más propicios porque quiere afianzar que “el País Vasco es parte fundamental del proyecto de España” que defiende Ciudadanos, dicen en la formación.

El que no recalará en tierras vascas es Alberto Garzón, el candidato de Unidad Popular-IU. Sus compañeros en Euskadi de Ezker Anitza, a los que los sondeos no otorgan representación, se tendrán que conformar con la visita del coordinador general de IU, Cayo Lara, el 11 de diciembre.

Podemos. Podemos tratará de cerrar la crisis interna en Euskadi con el mitin de Pablo Iglesias e Iñigo Errejón el 14 de diciembre en Bilbao. El número dos volverá a repetir en otro acto, sin fecha confirmada, también en Bizkaia.

Ciudadanos. Albert Rivera se estrena en Euskadi como candidato a la Moncloa en un acto el 16 de diciembre en Gasteiz.

PSE. Pedro Sánchez repetirá su respaldo al PSE con su presencia, durante una jornada al menos, en varios actos socialistas.

PP. Aún sin fecha confirmada, el PP de la CAV confía en que Mariano Rajoy haga un hueco en su agenda para Euskadi.