Gasteiz - El Gobierno Vasco pretende que el próximo Día de la Memoria, que se conmemora el 10 de noviembre, sea unitario y sirva para tener presente el recuerdo de las 707 personas asesinadas en la CAV por motivación política en el periodo comprendido entre 1960 y 2010. Ese es el propósito del Ejecutivo de Iñigo Urkullu, cuyos responsables de la Secretaria de Paz y Convivencia presentaron ayer en una rueda de prensa celebrada en Gasteiz el documento completo de los Retratos Municipales de la Memoria, del que con anterioridad se habían dado a conocer los datos correspondientes a las tres capitales de la Comunidad Autónoma, un listado en el que aparecen todas las “vulneraciones del derecho a la vida” en el denominado caso vasco.

En el acto estuvieron presentes la directora de Víctimas y Derechos Humanos del Ejecutivo vasco, Monika Hernando, y la responsable de Gogora -Instituto de la Memoria y la Convivencia-, Aintzane Ezenarro, quienes mostraron su confianza en que en próximas ediciones del Día de la Memoria pueda alcanzarse un “consenso” en torno a esta conmemoración, que desde su instauración en 2010 ha estado marcada por la división entre partidos.

Según se recoge en el listado, entre 1960 y 2010 hubo 707 personas fallecidas en Euskadi, de las que 572 fueron asesinadas a manos de ETA y los Comandos Autónomos Anticapitalistas; grupos de extrema derecha como GAL, GAE, BVE y Triple A asesinaron a 61 personas; por acción de las fuerzas policiales murieron 58 personas; y se recoge además 16 fallecimientos de “autoría confusa”. Estas muertes violentas se produjeron en 128 municipios de la CAV, de los que 58 están ubicados en Bizkaia, 56 en Gipuzkoa y 14 en Araba. Sin embargo, es Gipuzkoa con 394 casos donde más fallecidos ha habido, mientras que en Bizkaia fueron 258 los muertos y en Araba se dieron 55 casos. Los listados se dividen en función del municipio al que pertenecía la víctima y del lugar en el que se produjo su muerte, de modo que hay 128 documentos específicos para las 128 localidades.

Además, y por cuanto se refiere a los años en los que se produjeron estos hechos, las décadas más violentas fueron los 70 y los 80 con 237 y 358 personas fallecidas en esos veinte años, respectivamente. La última década (2000-2011) se saldó con 24 personas fallecidas. Hay que recordar en este sentido que el 20 de octubre de 2011 ETA anunció el cese definitivo de actividad armada. Además, y según el listado, 678 de los fallecidos eran hombres y 29 mujeres.

Reunión con los alcaldes La intención de los integrantes de la Secretaría de Paz y Convivencia del Gobierno vasco es reunirse de forma individual con representantes de los 128 municipios en los que se produjo una muerte violenta para entregarle el listado correspondiente a su localidad. Además, en septiembre se celebrará en la sede de Gogora -Instituto de la Memoria- en Bilbao una reunión los alcaldes de todos estos municipios de la CAV.

Así, en el Día de la Memoria, el Ejecutivo vasco pretende que en la mayoría de los municipios, o por lo menos en los más importantes de la Comunidad Autónoma, se realice un homenaje en recuerdo a las personas fallecidas en cada localidad. Además, en este homenaje se leería la lista de las personas fallecidas. Hasta ahora no ha sido posible realizar estos actos de recuerdo a los fallecidos en todos los municipios vascos en los que se ha producido una muerte violenta.

Aunque se trata de una competencia municipal, los responsables de la Secretaria de Paz y Convivencia del Gobierno Vasco aseguraron que el Ejecutivo de Gasteiz ofrecerá toda la colaboración que soliciten los ayuntamientos para esta labor.

Según apuntó Aintzane Ezenarro, consideran que una vez elaborados los listados específicos de las personas fallecidas en cada municipio, será “difícil” que alguien se “niegue” a recordar a un vecino muerto en esa localidad. A su juicio, el carácter concreto de los homenajes que pueden hacerse en cada localidad harán que “el consenso sea más fácil” que si, por el contrario, se tratase de un recuerdo más genérico, sin poner rostro a las víctimas, más cuando muchas de ellas han caído en el olvido.

Los homenajes a las víctimas están contemplados en el Mapa de la Memoria, pero según afirmaron los responsables de la Secretaría de Paz, el Gobierno Vasco deja en manos de los diferentes ayuntamientos la celebración de los actos que consideren oportunos. De la misma manera, desde el Ejecutivo de Gasteiz se solicita el máximo respeto para las familias de víctimas que no deseen tomar parte en los homenajes.

Además de estos documentos que hacen referencia a las personas fallecidas en la CAV, el Gobierno Vasco trabaja en otra iniciativa en la que se pretende recoger información sobre las vulneraciones del derecho a la vida que se hayan producido en el resto del Estado y que tengan como origen la violencia política vivida en Euskadi en las últimas décadas.

Discrepancias Con esta iniciativa, el Ejecutivo presidido por Iñigo Urkullu pretende acabar con las diferencias que han marcado el Día de la Memoria desde su instauración en 2010, una división entre partidos políticos y las instituciones con respecto al alcance y significado que debe tener unos actos de estas características.

Así, en la primera edición fueron los partidos que actualmente conforman EH Bildu quienes no participaron en los homenajes. Los partidos de la coalición soberanista mostraron entonces su rechazo al hecho de que en los diferentes homenajes no se incluyeran a las personas que sufrieron vulneraciones de derechos humanos por parte de las Fuerzas de Seguridad del Estado.

El pasado año, y salvo en actos puntuales como el que tuvo como escenario el Parque de Doña Casilda en Bilbao, las discrepancias entre las fuerzas políticas fueron patentes y baste recordar en este sentido que tanto PP como UPyD se negaron a tomar parte en el acto de homenaje y recuerdo celebrado en el Parlamento Vasco -en el que sí estuvieron miembros del resto de fuerzas política con representación parlamentaria- al considerar que los destinatarios del acto debían ser las únicamente las víctimas de ETA y no otras, en una clara alusión a las de abusos policiales.

Estos Retratos de la Memoria se viene a sumar a otras iniciativas puestas en marcha por la Secretaría de Paz y Convivencia incluidas en el Plan de Paz elaborado por los responsables de este departamento. Así, hace un par de semanas se presentó el proyecto denominado Plaza de la Memoria, con el que el Ejecutivo autonómico pretende promocionar la participación y contribuir a consolidar y reforzar una cultura de paz, convivencia y derechos humanos mediante la interacción entre instituciones y ciudadanos.

El programa, que comenzó el pasado mes de junio y se desarrollará hasta el próximo noviembre, busca recoger tres tipos de aportaciones que consistirán en testimonios directos de memoria entregados voluntariamente por los ciudadanos; sugerencias obtenidas por medio de un proceso cualitativo de participación, y opiniones aportadas por expertos.

Con los testimonios recogidos, el 7 de noviembre, tres días antes de la conmemoración del Día de la Memoria y de la inauguración del Instituto de la Memoria, se celebrará una mesa redonda sobre construcción de la memoria y participación ciudadana en la que tomarán parte varios expertos.