Donostia - Una nueva polémica y tres reuniones trataron ayer de poner el punto final a la crisis abierta en el PP guipuzcoano después de que la presidenta Arantza Quiroga vetara al candidato por Donostia propuesto por su homólogo en Gipuzkoa, Borja Sémper. La crisis se abrió después de que el Comité Electoral Provincial designara el lunes a Ramón Gómez como candidato en Donostia y, 72 horas después, el PP de la CAV revocara con el aval de Génova esta decisión y nombrara a Miren Albistur como aspirante. La sesión de control al Gobierno Vasco en el Parlamento de Gasteiz situó el primer foco de atención de la jornada en el rifirrafe entre Quiroga y Sémper.

La presidenta del PP de la CAV y el líder en Gipuzkoa hablaron ante la prensa a la entrada del Parlamento con ánimo de cerrar filas, pero evidenciaron las consecuencias de la crisis interna. Quiroga censuró que la dirección popular en Gipuzkoa actuó de forma “poco democrática” al “hurtar” un debate del comité electoral sobre más opciones que la de Gómez. Rechazó que su decisión a favor de Albistur haya sido una “imposición”, como ha denunciado la cúpula del PP guipuzcoano, y explicó que intervino como consecuencia de “un procedimiento que no se ha hecho bien”.

El Comité Electoral Provincial se reunió el lunes - “sin notificarlo a la dirección regional”, censuraron el jueves fuentes próximas a Quiroga- y, pese al compromiso adquirido ante los otros cinco concejales donostiarras durante la legislatura de relevar a Gómez en 2015, sus seis miembros decidieron por unanimidad mantener al portavoz. Esta decisión provocó que los ediles enviaran el jueves por la mañana una carta a las ejecutivas del PP en Gipuzkoa y la CAV “con el objetivo de revocar esta decisión y cumplir con lo acordado en 2013”. Fuentes próximas a Quiroga relataron a este diario que “la dirección de la CAV se enteró como se enteró de esa reunión del Comité Electoral”. Génova, cuyo refrendo es imprescindible en el caso de los candidatos de las capitales de provincias, también tuvo conocimiento de la crisis el mismo jueves por la mañana.

La resolución de esta pugna que se había prolongado durante meses ya era inaplazable, más con la amenaza de renuncia de los cinco concejales sobre la mesa si Madrid acababa por refrendar a Gómez. Según señaló Quiroga ayer en el Parlamento, “las cosas no se han hecho como se tenían que hacer en Gipuzkoa, y eso ha obligado a tomar una decisión”.

Unas palabras que Sémper rechazó de plano al asegurar que no ha habido “error de procedimiento”. El presidente del PP de Gipuzkoa también mostró su malestar con los métodos, pero más con el procedimiento que fijan los estatutos para designar a los aspirantes: “No me gusta cómo elegimos candidatos, no me gustan los dedazos, no me gustan las decisiones unilaterales y no me gustan los candidatos elegidos porque no sé a quién le gusta o por las cercanías afectivas que pueda tener”.

El también portavoz parlamentario del PP, que dijo no querer “contribuir a un vodevil” por la “vergüenza” y por el “asco” que le daba “proyectar esta imagen ante los ciudadanos”, asumió la designación de Albistur, “una magnífica persona”: “Por mí no va a haber ningún problema, lo encajo y lo acepto. Hay que tirar para adelante”.

Aun así, Sémper, que el jueves se reunió con Quiroga durante dos horas -“hasta diez minutos antes de la rueda de prensa de Llanos”, según aseguraron fuentes de la dirección popular, en referencia a la comparecencia para anunciar a Albistur-, dijo que “el PP de Gipuzkoa tiene muy claro cuál era su candidato. La candidata elegida por la presidenta no es la candidata del PP de Gipuzkoa, pero el PP de Gipuzkoa, desde hoy, está con esa candidata”. Sémper, que rechazó dimitir aunque “en esta vida quién sabe dónde vamos a estar mañana o dentro de un mes”, volvió a defender a Gómez: “Creemos que Gómez era mejor que Albistur y en esto ha habido discrepancias. Se han resuelto como se han resuelto. ¡Qué le vamos a hacer! A veces se gana y otras se pierde”.

El segundo de los escenarios fue Donostia, donde cargos electos del PP guipuzcoano -incluidos los cinco ediles donostiarras- se reunieron más de hora y media para hablar de lo sucedido. Sin Sémper -en Gasteiz- ni Gómez, el secretario general del PP guipuzcoano, Juan Carlos Cano, tomó la palabra para explicar lo sucedido y tratar de “cerrar filas”, tras lo cual los presentes, entre los que estaban los concejales críticos con el actual portavoz, compartieron sus reflexiones. El ánimo fue el de zanjar la polémica, pero volvieron a encontrarse, como en Gasteiz, los argumentos de una y otra parte. Uno de los asistentes reconoció que de esta manera se trataba de cerrar un proceso en el que “no ha habido una bronca, sino un broncón”.

La cita arrancó a las once de la mañana y concluyó dos horas más tarde. Hubo que esperar hasta cerca de las cinco de la tarde para que, tras horas de silencio, el portavoz se declarara en Twitter “orgulloso” de su “trabajo por San Sebastián y los donostiarras, y agradecido por tantas muestras de cariño de la gente que lo valora”. En Madrid, por otra parte, se reunió el Comité Electoral Nacional, que dio luz verde como se esperaba a la candidatura de Miren Albistur.

sin candidatos en madrid No fue la única candidatura ratificada por el Comité Electoral Nacional. También ratificó a los aspirantes de Castilla-La Mancha (Dolores de Cospedal), Castilla y León (Juan Vicente Herrera), Aragón (Luisa Fernanda Rudi), y Cantabria (Juan Ignacio Diego), así como los de sus capitales. También designó a los aspirantes de las ocho capitales andaluzas y las cuatro catalanas, donde destaca el candidato de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, hermano del ministro del Interior. El PP mantiene la incógnita sobre plazas cruciales como Madrid y Valencia.