atenas/bruselas - El principal mensaje de los líderes de Syriza a los socios europeos fue que el Gobierno renegociará la deuda pero con soluciones que sirvan a toda Europa. “No habrá duelos, no habrá amenazas y no habrá preguntas de quién será el primero en caer”, dijo el nuevo ministro de Finanzas, Yanis Varufakis, quien se congratuló del “espíritu de negociación” que ha visto en los últimos días en Europa.

Varufakis aseguró que los socios, tras la victoria electoral de Syriza, “reconocen el Gobierno” y le darán una “oportunidad para un nuevo comienzo”, que será el reinicio para el “conjunto de Europa”.

El nuevo ministro de Finanzas se dijo defensor de la “vida austera” pero opositor a una “austeridad piramidal”, que reduce los ingresos de los que menos tienen y aumenta las deudas que no pueden pagarse.

confianza en el acuerdo En términos conciliadores también se manifestó el comisario europeo de Asuntos Económicos, el socialista francés Pierre Moscovici, que piensa que no debe haber una “ruptura” entre la UE y Atenas tras la llegada al poder del líder de Syriza, Alexis Tsipras. Aunque prometió que en adelante Bruselas será “menos intrusiva” en Grecia, Moscovici descartó de nuevo una condonación de la deuda y pidió al nuevo Gobierno heleno que respete los compromisos. “Los griegos han hecho muchos esfuerzos, muchos sacrificios que comienzan a dar frutos. La Comisión y la UE están dispuestas a intercambios menos intrusivos que en el pasado, a formas de colaboración más flexibles”.

No obstante, resaltó que los compromisos de Grecia con sus socios europeos han sido asumidos no por un Gobierno sino por el propio país. “La idea de una reducción general de la deuda o de una condonación de la deuda no parece generar unanimidad, pero hay otros medios de actuar. Debemos estar en una lógica de búsqueda de compromisos, no de confrontación”, concluyó. - Efe