GASTEIZ - El lehendakari grabó ayer su tradicional mensaje de fin de año, que será retransmitido mañana a la noche en ETB. Según explicaron fuentes del Gobierno Vasco, Iñigo Urkullu dedicará prácticamente todo su discurso a la crisis económica, y tratará de insuflar ánimo a la sociedad vasca esgrimiendo los indicadores del crecimiento económico y con cierto optimismo, aunque sin caer en triunfalismos y con prudencia. También apostará por mantener los servicios públicos y la cobertura social. En ese sentido, Lakua, las diputaciones y los ayuntamientos han logrado dar forma a una cartera de servicios sociales en las últimas semanas, y el Ejecutivo vasco se ha opuesto a la propuesta del PP de restringir el acceso a la renta de garantía de ingresos por el supuesto abuso de los inmigrantes magrebíes. Se prevé que el lehendakari vuelva a poner en valor la cobertura social vasca.

En concreto, Urkullu precisará que los próximos años seguirán siendo duros, pero ya dentro de la etapa del crecimiento. Según las fuentes consultadas, el lehendakari casi no dejará hueco para otras cuestiones, consciente de que la principal preocupación de la ciudadanía pasa por atajar el paro y encauzar la recuperación. En cualquier caso, sí aludirá a la consolidación de la paz tras el cese de ETA, un punto en el que también ha propuesto medidas en los últimos días. Ha planteado una vía vasca de desarme para que la organización pueda entregar su arsenal en un proceso tutelado por las instituciones vascas, los verificadores internacionales y el Foro Social, en lugar de esperar a un Gobierno español que no quiere entrar en un desarme ordenado.

Por último, Urkullu se referirá al reto del nuevo estatus, aunque se prevé que sea su alusión más breve, ya que el debate está en manos del Parlamento Vasco y no quiere interferir en sus planteamientos. Además, aún habrá que esperar hasta después de las elecciones municipales y forales de mayo para que el debate coja ritmo y los partidos comiencen a pulir sus propuestas. - M.V.