Varsovia - El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ofreció en 2008 a Polonia dividirse Ucrania en dos zonas de influencia, según unas revelaciones del exministro de Exteriores polaco Radoslaw Sikorski que han provocado polémica en el país.

En una entrevista con la revista estadounidense Politico, Sikorski, presidente del Parlamento polaco tras ejercer durante siete años como ministro de Exteriores, relata el contenido de un encuentro que mantuvieron en 2008 Putin y el entonces primer ministro de Polonia, Donald Tusk.

La conversación tuvo lugar durante una visita del líder polaco a Moscú, donde, según Sikorski, el presidente ruso calificó a Ucrania de “país artificial” y afirmó que Lvov (al este de Ucrania) era una “ciudad polaca” (hasta la II Guerra Mundial era territorio polaco). “Así que ¿por qué no acabamos de solucionar el problema juntos?”, le propuso a Tusk, según Sikorski. “Sabemos que han estado pensando eso durante años” y Putin “nos quiso convertir en participantes en esta partición de Ucrania”, afirma el exjefe de la diplomacia polaca. Según apunta, “afortunadamente Tusk no respondió” porque “sabía que la conversación estaba siendo grabada”. En opinión del exministro, la actual guerra civil en el este de Ucrania “comenzó en realidad en 2008”.

La prensa polaca calificó ayer la oferta de Putin a Tusk de “indigna” y la compara con el pacto Ribbentrop-Molotov que firmaron en 1939 la Alemania nazi y la Unión Soviética para dividirse Polonia. “Ningún primer ministro polaco, ciertamente yo nunca lo haría en mi vida, podría participar en un acto tan vergonzoso como dividir el territorio de otro país”, dijo ayer a los medios la actual primera ministra y sucesora de Tusk, Ewa Kopacz.

“Ninguno político polaco podría suscribir algo así”, reiteró Kopacz, quien aseguró no tener constancia de que Putin hiciese en 2008 semejante propuesta. “Si así fuera, sería un auténtico escándalo”, añadió.

Mientras el autor de estas declaraciones, Radoslaw Sikorski, explicaba la pasada noche a través de su cuenta de Twitter que la entrevista con la revista estadounidense no fue autorizada, en referencia a una práctica habitual en Polonia, donde el entrevistado suele arrogarse del derecho a autorizar o no la publicación de sus palabras.

El autor del polémico texto, Ben Judah, recordó ayer en declaraciones a la cadena polaca TVN24 que en Estados Unidos no existe ninguna obligación de someter los textos a autorización previa su publicación. A través de Twitter, Judah añadió que “el hecho de que Donald Tusk se negase a suscribir un nuevo pacto como el Ribbentrop-Molotov solo lo hace más digno de liderar la Unión Europea”, en referencia a su designación como presidente del Consejo Europeo en sustitución de Herman Van Rompuy

La prensa polaca se hace eco también de las palabras del portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, quien el lunes intentó zanjar la polémica al señalar que la entrevista “no tiene sentido” y avanzar que no habrá respuesta del Kremlin a las observaciones de Sikorski.

Respetar la tregua Por otra parte, el propio Putin y su homólogo ucraniano, Petro Poroshenko, abogaron ayer por un cese del fuego en el este de Ucrania en vísperas de las elecciones legislativas del domingo.

Durante una conversación telefónica, ambos presidentes “subrayaron la necesidad de garantizar un total cese del fuego y una tregua artillera” entre el Ejército de Ucrania y los separatistas prorrusos, según informó la presidencia ucraniana.

Por su parte, el Kremlin informó de que Putin y Poroshenko coincidieron al apoyar el alto el fuego en las regiones de Donetsk y Lugansk como proceso de arreglo pacífico del conflicto que estalló en abril pasado. Durante un viaje a Dniepropetrovsk, limítrofe con Donetsk, Poroshenko adelantó el acuerdo alcanzado entre ambos bandos para acallar la artillería que sigue activa pese a que en la zona rige un alto el fuego desde el pasado 5 de septiembre. - Efe