gasteiz - Un mes después de que el lehendakari, Iñigo Urkullu, viajara hasta Madrid para reunirse con el presidente del Gobierno español, los teléfonos de Lehendakaritza siguen sin sonar. El jefe del Ejecutivo autonómico aguarda aún la respuesta de Mariano Rajoy en torno a los planteamientos sobre crecimiento económico, autogobierno y paz y convivencia que puso sobre la mesa, demandas que requieren de respuesta antes de que comience el próximo año y entren en vigor los últimos presupuestos del Gobierno del PP en la presente legislatura.

En respuesta a una pregunta que el parlamentario del PSE Txarli Prieto llevó hasta el Pleno de control, Urkullu destacó que pese al silencio de Madrid hasta el 31 de diciembre hay tiempo para “comprobar la voluntad de diálogo, negociación y acuerdo” de Rajoy. Aseguró que por parte del Ejecutivo de Gasteiz se mantendrán los mismos puente tendidos con los que pretenden afianzar una relación “fluida y constructiva”, aunque concretó que “otra cosa es la respuesta del Gobierno español”.

La intención del lehendakari, así como su “obligación”, será insistir en los mensajes al presidente del Gobierno para que las Cuentas del Estado del próximo año reflejen ausencias hoy por hoy determinantes, en opinión del Gabinete autonómico. En este sentido, Urkullu insistió, como ya lo hiciera tras el encuentro celebrado el 15 de septiembre, en la necesidad de poner punto y final en 2015 a la liquidación del Cupo, pendiente desde 2008, y a las inversiones en el trazado del Tren de Alta Velocidad (TAV) y el aeropuerto de Foronda. En lo que respecta al proyecto ferroviario, Urkullu recalcó el “incumplimiento”, a tenor de las cantidades recogidas en el anteproyecto presupuestario, del impulso a la construcción del nudo de Bergara al que Rajoy se comprometió en sede parlamentaria para el próximo ejercicio. Más grave aún resulta la posición del Gobierno de Madrid en relación con el aeródromo gasteiztarra, donde lejos de potenciar estas instalaciones con la recuperación de la apertura 24 horas, el Ejecutivo “refuerza su apuesta logística” por los aeropuertos de Burgos y Zaragoza, según recordó el dirigente jeltzale.

desbloqueo Pese a estos reveses, Urkullu insistió desde el atril de oradores en que su disposición “ha de ser positiva” para desbloquear la cerrazón de Madrid. “No voy a cerrar las puertas a acuerdos que supongan nuevos instrumentos para que Euskadi afronte la salida de la crisis con la mayor fortaleza posible”, indicó instantes antes de destacar que “esta actitud no es de ingenuidad, sino de perseverancia y de responsabilidad”.

El lehendakari también quiso aportar cierta dosis de optimismo ante los retos que tiene por delante con una mirada al pasado reciente en la que Urkullu repasó algunos de los pactos más relevantes fraguados con Madrid. En este capítulo añadió la armonización de nuevos tributos, el acuerdo para flexibilizar la deuda y el objetivo de déficit, así como el desbloqueo de la tasa de reposición de empleo público que puso en jaque el futuro de la OPE de la Ertzaintza.

A este respecto, el lehendakari declaró que en su último encuentro con Rajoy le planteó la posibilidad de elevar esta tasa para las convocatorias públicas del 10% actual al 50%, “cosa que ahora se está debatiendo”, apuntó.