gasteiz - El clásico despacho del delegado del Gobierno contrasta con la aparente funcionalidad que se persigue en el resto del inmueble. Sentado frente a un elegante escritorio, Carlos Urquijo repasa un cúmulo de notas que resumen sus casi tres años de representante del Ejecutivo de Mariano Rajoy en Euskadi. Para la primera pregunta no necesita alforjas. Su intermediación en la polémica originada a raíz del recurso impuesto por el Estado contra el refuerzo de la Ertzaintza comenzó hace apenas una semana.
¿Está de acuerdo en desactivar la OPE de la Ertzaintza?
-Estoy de acuerdo en tratar de encontrar un acuerdo entre las dos partes: entre el Gobierno de España y el Gobierno Vasco. Pero creo que es conveniente explicar la génesis de esta circunstancia para conocer por qué la Abogacía del Estado ha interpuesto un recurso.
Le escucho.
-En abril empiezan a cartearse la Secretaría de Estado con el Departamento de Seguridad, porque la Ley de Presupuestos establece que en el caso de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad no se podrá superar la tasa de reposición. El Gobierno Vasco contesta que el ámbito en el que se determina la política de la Ertzaintza no es éste, sino el de la Junta de Seguridad, donde se estableció que la plantilla debía ser de 8.000 efectivos y que no se ven afectados por la Ley de Presupuestos. Pero la Secretaría de Estado le advierte de que es una ley orgánica que afecta a todas las comunidades. Pues bien, el 25 de septiembre llega la orden a la Abogacía del Estado para interponer el recurso y así se hace, es decir, ni por sorpresa ni con nocturnidad ni alevosía.
¿Qué papel tiene usted en este proceso?
-Soy de los que piensa que más vale un mal acuerdo que un buen juicio, por eso hablé con el Ministerio y les planteé la posibilidad de llegar a un acuerdo que permita que se pueda desistir, una vez presentado el recurso, por satisfacción extraprocesal, es decir, lograr un acuerdo. La cosa no es sencilla, porque por la tasa de reposición estaríamos hablando de que de las 120 plazas ofertadas, el Gobierno Vasco tendría derecho a 20.
¿Dónde quedan las 100 plazas restantes?
-Tendríamos que ver cómo se pueden encajar sin contravenir la Ley de Presupuestos.
¿Cuál es la propuesta que maneja el Ministerio?
-A mí, y al Gobierno, nos consta que hay una bolsa de plazas de convocatorias que no se han realizado durante este año, y que pueden incorporarse a la OPE de la Ertzaintza. Trasladé esta posibilidad al Ejecutivo vasco y me dijeron que podrían hacerlo, pero que también tenían intención de poner en marcha otras ofertas de empleo, fundamentalmente en Osakidetza, y que el detraer esas 100 plazas supondría que otras convocatorias podían quedarse cojas.
Parece lógico, ¿no cree?
-Puede ser, pero con la intención de desbloquear el contencioso les trasladé que los Presupuestos Generales del Estado del próximo año probablemente incorporen una previsión mayor, con lo cual aunque tengas previstas nuevas OPE la realidad es que quedan tres meses de 2014, por lo que una convocatoria estaría forzada en el tiempo, mientras que las expectativas del año que viene serán mejores. Con todo esto, creo que si hay voluntad política se puede llegar a un acuerdo, pero la cuestión es si el Gobierno Vasco quiere evitar este contencioso o políticamente le resulta rentable decir que el Gobierno de España ataca uno de los pilares del autogobierno como es la Policía vasca. No se puede hacer un uso político de este caso.
¿Quiere decir que el acuerdo de la Junta de Seguridad, del que usted mismo como parlamentario del PP fue impulsor y defensor, ahora se demuestra que se hizo mal y que no tiene validez?
-Tampoco me gusta mirar hacia atrás, no se cuál tenía que haber sido el mecanismo, pero lo que está claro es que todos estamos sometidos a las leyes y obligados a cumplirlas. No puede haber islas.
Sí, pero acláreme para qué vale lo acordado en un órgano bilateral como la Junta de Seguridad.
-Bueno, pues eso es lo que está en discusión. El Gobierno Vasco mantiene que lo que se dijo en la Junta de Seguridad va a misa y el Gobierno de España mantiene que la Ley de Presupuestos del Estado es de obligado cumplimiento para todas las comunidades. Y yo creo que con la OPE de la Ertzaintza se puede lograr un acuerdo al igual que se ha hecho con la LOMCE, pese a que el Gobierno Vasco mantenga su recurso, y con otras siete leyes. Mejor seguir este camino que esperar a que un tribunal diga que tiene razón el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y obligue a someterse al 10% de la tasa de reposición.
Así nos plantamos en dos años, según cálculos del Gobierno Vasco, con una Ertzaintza de 7.500 agentes, medio millar por debajo de lo que se consideró el mínimo exigible.
-Sí, pero eso es política ficción...
Igual de política ficción que lo que pueda ocurrir el año que viene con esa supuesta flexibilización en los índices de contratación de la que habla, ¿no cree?
-Por eso creo que hay mimbres para un acuerdo y no jugar con las cosas de comer. A mí lo que me preocupa es la gente que está inmersa en una oferta pública de empleo, que se está preparando para esas pruebas, que ya ha hecho algunos exámenes, y que si esta cuestión no se desbloquea va a estar en una situación que para mí no me gustaría.
¿Usted sigue defendiendo que la Ertzaintza debe tener un mínimo de 8.000 agentes?
-Creo que es una cifra razonable, pero una cosa es lo deseable y otra cosa es lo legal. Y, en este caso concreto, lamento que nadie del Gobierno Vasco haya dicho que existía una oferta del Gobierno de España y que había una mano tendida. Las cosas hay que contarlas tal y como son.
¿Comparte con el diputado general de Álava que sin el absentismo actual no haría falta reforzar la Ertzaintza?
-El diputado general de Álava rectificó y reconoció que el absentismo se ha reducido en los últimos años.
¿Ve aquí un uso político de una polémica?
-Hay que ver en qué momento se hacen esas declaraciones, que es cuando se conoce que por parte del Departamento de Seguridad se va a reestructurar la presencia de la Ertzaintza en Álava. Lo que hay por parte del diputado general es una demanda de mayor seguridad. Se está diciendo que en el territorio más extenso es donde menos plantilla existe.
En la misma semana que la Ertzaintza conoce que podía perder agentes, usted insiste en que la Policía Nacional y la Guardia Civil “nunca” van a abandonar Euskadi.
-Van a estar porque ya no solo lo dice la Constitución, sino que el Estatuto de Gernika en el artículo 17 deja claro cuáles son sus funciones. También hay ámbitos en los que no queda demasiado claro de quién es la competencia, por lo que se trata de compartir la información y cooperar para que las cosas se hagan de la mejor manera posible. A la gente le importa más bien poco si su casa está protegida por alguien con boina roja, tricornio o uniforme azul, lo que quiere es seguridad. Esa es la opinión de la gente.
Si entendemos el Parlamento Vasco como el reflejo de la opinión de esa gente que usted menciona, también existe un pronunciamiento mayoritario en favor del repliegue de estas fuerzas policiales.
-Ellos dicen que no hablan de repliegue sino de adecuación. Lo que no podemos es entrar otra vez ahí, porque no es lo más importante. Lo importante es que sea el número de efectivos que sea de una policía o de otra, el objetivo no debe ser rivalizar, sino colaborar.
Tres años después del cese de ETA, ¿qué pasos considera que se pueden dar?
El único que se puede dar es de la disolución de la banda, los demás no tenemos que dar ningún paso. Bastante hicimos con no dar ningún paso atrás cuando nos atacaron.
¿Qué le parece el programa de reinserción Hitzeman?
-Tengo que decir que no he recibido ningún documento aún, pero por lo que he leído creo que la Secretaría General del Paz y Convivencia están planteando cuestiones que no son de su competencia.
¿El fin de la dispersión podría allanar el camino para consolidar la paz?
-El fin de la dispersión está en manos de la banda terrorista. Quien ha querido separarse de ella, reconocer el daño causado, ha pedido perdón, ha colaborado con la Justicia, está en el País Vasco.
¿Comparte el traslado de presos desde Francia a España que han acordado los gobiernos de estos países?
-Eso deriva de un acuerdo marco de la UE que se pactó en el año 2008, que Francia ya lo tiene traspuesto a su legislación y que España está tardando más pero está obligada a trasponerlo.
Pero no deja de suponer un acercamiento de los presos.
-El acuerdo dice que el recluso tiene derecho a cumplir la pena en el país de origen, otra cosa es que esté más o menos lejos de su casa. Nada que objetar. No es que sea un acuerdo entre dos países para reinsertar a los presos etarras.
¿Cree que si ETA continuara ejerciendo la violencia este acuerdo se aplicaría de igual forma?
-Supongo que sí, pero es política ficción.