BILBAO. Durante el acto de presentación, que ha tenido lugar en el Bizkaia Aretoa de Bilbao, también han estado presentes el director del Centro Internacional para la Cooperación y Resolución de Conflictos de la universidad de Columbia, Peter Coleman, y el representante de la Universidad Seton Hall, Andrea Bartoli.
Según Ibarretxe, uno de los objetivos más importantes que tiene Euskadi es la realización de "un diagnóstico del problema". "Si no, es imposible adaptarse y desarrollar una terapia de tratamiento. Por eso debemos mirar al mundo para conocer Euskadi", ha recomendado.
"Es necesario recuperar nuestra memoria, saber porqué nacimos, centrándonos en la proyección internacional de los vascos y sus esfuerzos por el desarrollo", según el lehendakari.
Además, Ibarretxe ha adelantado que están trabajando con países de Latinoamérica en la recuperación de las diferentes lenguas indígenas de países como México, Perú, Chile, Bolivia, Ecuador o Brasil.
Para Bartoli, lo que el ALC está haciendo es "reunir ideas y a la gente, la única para mantener a los humanos juntos y poder aceptar y respetar las diferencias que existen para poder explicar en un futuro lo que está ocurriendo hoy".
"Para mí, el trabajo y la implicación de Ibarretxe es una inspiración para reflexionar para crear una visión conjunta", ha asegurado Coleman.
El evento ha contado con la participación del pintor Jesus Mari Lazkano y del investigador del ALC, Gorka Espiau, quien ha adelantado las propuestas de intervención del centro.
Durante la jornada, ha habido espacio para el debate y para la presentación del proyecto "Peace building and technology Lab" (Laboratorio tecnológico de consolidación de la paz) de la mano del director del Instituto Internacional de Investigación de Conflictos y profesor de Estudios de Conflicto y Paz de la Universidad del Ulster, Brandon Hamber.
Juan José Ibarretxe presentó su tesis doctoral en 2011 con el título "El caso vasco. Principio ético, principio democrático y desarrollo humano sostenible: fundamentos pata un modelo democrático.