BILBAO - El consejero de Hacienda del Gobierno vasco, Ricardo Gatzagaetxebarria, ha transmitido a todos los departamentos del Ejecutivo la consigna de contención y cautela en el gasto corriente para hacer frente a las estrecheces económicas derivadas de la bajada de la recaudación fiscal de la CAV el año pasado y comienzos de este.

El Ejecutivo de Gasteiz confirmó ayer este extremo en respuesta a las acusaciones del PSE que, horas antes, había advertido de la existencia de "problemas económicos" en el Gobierno. El portavoz parlamentario de los socialistas, José Antonio Pastor, llegó a asegurar que "desde hace varias semanas existe la orden de retener el 20% de los créditos" de los capítulos de gasto corriente, inversiones y subvenciones. La respuesta del Departamento de Hacienda llegó mediante un comunicado en el que, tras indicar que no ha habido una decisión oficial para que se produzcan recortes en el gasto de las partidas presupuestadas, reconoce que "lo que sí ha hecho es concienciar e informar a los departamentos a que actúen con prudencia y cautela en la planificación y ejecución de los gastos a la vista de la ejecución de los ingresos".

El Gabinete de Urkullu actúa también en esta ocasión guiado por la máxima de no gastar más de lo que tiene. Fuentes del Gobierno Vasco consultadas señalaron a este diario que el problema radica en la bajada de lo recaudado por las tres haciendas vascas en el conjunto de la CAV el año pasado respecto a las previsiones. El dato del ejercicio anterior se cerró en febrero y confirmó un descenso de algo más de seis décimas sobre la estimación realizada por el Consejo Vasco de Finanzas de octubre del año pasado, en base a la cual se elaboran los Presupuestos Generales del siguiente curso.

A ello que hay que añadir el mal comportamiento de la recaudación en el primer trimestre de este año, cuyo dato se hizo público ayer, con un descenso del 0,5% respecto a la de igual periodo que en el ejercicio anterior. Todo ello ha supuesto una merma de unos cien millones de euros de ingresos en caja del Ejecutivo vasco.

El Departamento de Hacienda subraya que "tiene que cuidar que los escenarios de gastos sean fiel reflejo de los escenarios de ingresos previstos acompasando una ejecución coherente de ambos". En cualquier caso, las fuentes consultadas subrayan que no se van a paralizar los programas ya puestos en marcha como el de financiación y el de internacionalización de pymes, ayudas de emergencia social y otras ayudas excepcionales. No descartan posibles pequeños retrasos en su ejecución "dependiendo de la evolución de la recaudación que, de todos modos, todo apunta a que remontará". Estas mismas fuentes descartan que el Gobierno de Urkullu vaya a emitir más deuda pública para hacer frente a estas apreturas económicas.

Pastor denunció en rueda de prensa la "parálisis" del Gobierno de Urkullu y el "retraso" continuado de todas las órdenes necesarias para poner en marcha el conjunto de planes de fomento del empleo y la reactivación económica. Por este motivo, los socialistas han registrado treinta preguntas en el Parlamento para que el Gobierno vasco "confirme si esto es así y por qué lo está haciendo", y para que detalle "cómo afecta esa orden a cada sección, programa, partida y empresas y sociedades públicas".

En parecidos términos se expresó la parlamentaria de EH Bildu Belén Arrondo quien denunció que el Gobierno Vasco ha "bloqueado" la partida presupuestaria de 20 millones de euros para subvencionar los planes de empleo locales y comarcales para la contratación de parados, que han solicitado 51 instituciones municipales. En rueda de prensa celebrada en el Parlamento vasco, denunció la situación que están viviendo ante la falta de resolución de los proyectos locales presentados al Plan de Empleo del Gobierno Vasco. Su crítica coincide con la realizada el martes por la portavoz parlamentaria del PP, Laura Garrido.