MADRID. En una entrevista en TVE, recogida por Europa Press, el jefe de la Casa, Rafael Spottorno, no ha querido especular con las consecuencias que tendrá para los duques de Palma el fin de la fase de instrucción, aunque ha reconocido que en la institución trabajan con "varias hipótesis".

"Hay que confiar en la justicia. Nosotros siempre hemos respetado las actuaciones del magistrado. Y lo único que pedimos es que termine pronto. El sumario lleva tres años largos abierto. Entiendo que se han hecho todas las diligencias que tenían que hacerse y pienso que el señor magistrado entenderá que está ya en condiciones, así más o menos lo está anunciando a los medios de comunicación, de cerrar el sumario", ha indicado Spottorno.

El diplomático ha negado que 2013 haya sido para el Rey un annus horribilis, ya que lo empezó con problemas de movilidad por sus molestias en la cadera y lo ha terminado poniendo punto y final a esos problemas. Spottorno ha afirmado que el Rey se está recuperando bien de su última operación de cadera de noviembre pasado, y se ha mostrado confiado en que con esta intervención haya "superado" definitivamente esos problemas.

El jefe de la Casa ha afirmado que el monarca recuperará en 2014 su agenda internacional, que sí se vio notablemente reducida el año pasado como consecuencia de su estado de salud. En la primera mitad del año, posiblemente sólo hará viajes cortos (Lisboa y París están sobre la mesa), pero para el segundo semestre podría hacer desplazamientos más largos, como un posible viaje a Arabia Saudí.

En línea con el compromiso asumido por Don Juan Carlos en su Mensaje de Navidad, Spottorno ha asegurado que la institución cumplirá con la "letra y el espíritu" de la nueva Ley de Transparencia, que ha entrado recientemente en vigor y que, por iniciativa del propio Rey, también afecta a la Corona.

Spottorno confía en que la Ley de Transparencia permita acabar con la imagen "injusta" de opacidad que tiene la Casa. "Esta opacidad no existe. Otra cosa es que en esta vida hay que ser discreto", ha precisado.

También ha hablado del importante papel que el monarca juega como "moderador", más que árbitro, en el funcionamiento institucional. "El Rey habla con muchísima gente, ejerce su influencia moderadora y tranquilizadora en unos aspectos, impulsora en otros", pero "no puede ni debe intervenir abiertamente en el manejo de la cosa política", ha admitido.

"Habla con los líderes de los partidos, con los responsables económicos, les escucha y les empuja a la moderación y la razonabilidad", ha concluido.