MADRID. Así lo ha asegurado hoy la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, un día después de la concentración de las víctimas del terrorismo contra la sentencia europea que anula la doctrina Parot y en la que los dirigentes populares fueron abucheados y criticados por parte de los asistentes.
Reproches y abucheos que para la número dos del partido suponen una "grave injusticia" y quienes los hacen muestran una "gran ignorancia", por ir dirigidos a un partido que ha perdido a muchos de sus miembros de manos del terrorismo de ETA y que "siempre" ha estado del lado de las víctimas.
Los dirigentes populares vivieron ayer momentos difíciles en la concentración de la madrileña Plaza de Colón, y hoy Cospedal -que según ha recordado no estuvo en esa cita por un "asunto privado" que se lo impedía- ha dicho comprender la "crispación" de las víctimas.
Pero las ha distinguido de otras personas que estaban en la concentración y que "no son víctimas y tienen comportamientos que no se corresponden ni con la historia ni con la justicia".
En cualquier caso ha puesto en valor la presencia del PP en la concentración, muestra de que "siempre ha estado y estará al lado de las víctimas" y puede decirlo "con toda legitimidad", frente a otras fuerzas políticas que ayer no acudieron "porque no han estado nunca o sólo están cuando les interesa".
Los reproches hacia los populares que ayer se oyeron en Colón han sido fruto hoy de otras reacciones además de la de Cospedal.
"El dolor lleva a las personas a buscar a alguien a quien echarle la culpa", ha dicho en la Cadena Ser la presidenta del PP de Euskadi, Arantza Quiroga.
Quiroga ha señalado que se niega a interpretar la salida de presos como una "victoria" de ETA, porque los terroristas saben que están "acabados" aunque traten constantemente de que no se evidencie esa derrota.
No ha querido ocultar Quiroga que los dirigentes populares vivieron ayer momentos duros, pero "va en el cargo", ha dicho.
En un sentido parecido a Quiroga se ha manifestado el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, quien ha pedido hoy no olvidar, al margen de sentencias, que la "lucha" la ganó el Estado de derecho y "la perdieron los terroristas".
El ministro ha señalado que la concentración de ayer -a la que no asistió ningún miembro del Gobierno- fue "una ocasión magnífica de manifestar el apoyo a la víctimas del terrorismo" y de "reiterar" un compromiso "con lo que significa la dignidad" de esa "lucha" que ha ganado el Estado de derecho.
Mientras, el titular de Interior, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado que las víctimas tienen toda la "comprensión, solidaridad, afecto y cariño del Gobierno en momentos como éste" y ha considerado lógico que se sientan "indignadas y hasta humilladas" ante un hecho "especialmente doloroso", no solo para ellas sino también para el Ejecutivo.
Desde el PSOE, el número tres de ese partido, Oscar López, no ha querido comentar las críticas a los populares en la concentración, por la que ha mostrado su respeto, al igual que por el "dolor" de las víctimas, y ha insistido en que "afortunadamente con el Estado de derecho hace dos años que se acabó el terrorismo".
Sobre este asunto también se ha pronunciado hoy el fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, quien ha dicho a las víctimas que "la justicia no es traidora, es un poder independiente" y que "igual que en su día adoptó el criterio de la doctrina Parot, ahora otro tribunal lo ha revocado".
"Estamos sujetos al principio de legalidad y la división de poderes obliga a todos a pasar por las decisiones judiciales", ha añadido Calparsoro.
Mientras, la Audiencia Nacional ha hecho público hoy el auto en el que interpreta la sentencia de Estrasburgo que supuso la excarcelación de la etarra Inés del Río, y ha advertido de que es aplicable a otros presos de la banda terrorista que estén en la misma situación.
