DONOSTIA. La detención se registró durante la mañana de ayer, después de que este hombre, de 79 años, fuera visto por varios vecinos en la calle Ubilla de Hondarribia, la misma en la que causó la explosión el año pasado.
Los agentes que lo detuvieron ayer hallaron en el maletero de su coche tres garrafas de gasolina y una bombona de butano. Este vecino de la localidad costera provocó una explosión a las 06:00 horas del 17 de octubre de 2012 en el segundo piso de un inmueble de la calle Ubilla, en el casco histórico de Hondarribia, y causo daños cuantiosos que obligaron a desalojar del inmueble a 40 vecinos.
Días después, el presunto autor de la explosión se entregó a la Ertzaintza en la comisaría, acompañado de un abogado, y confesó haber volado el piso por "desavenencias con la constructora".
El hombre ingresó en prisión, pero posteriormente quedó en libertad tras serle impuestas una serie de medidas cautelares, entre ellas una orden de alejamiento de Hondarribia.
Sobre las 00.30 horas de la madrugada de ayer, un vecino de Hondarribia advirtió la presencia del sospechoso en la calle Ubilla, donde estaba manipulando el interior del maletero de un vehículo.
Al detectar la presencia de vecinos en la zona, el hombre abandonó el lugar a bordo del vehículo.
Las investigaciones de la Ertzaintza determinaron que el hombre visto en la calle Ubilla era el autor de la explosión sucedida en esa misma calle el pasado año.
Durante la mañana de ayer, el individuo acudió a la comisaría de la Ertzaintza de Irun, donde tiene que comparecer diariamente para cumplir con las medidas impuestas por el juzgado, momento en el que los agentes lo detuvieron por quebrantar la orden de alejamiento de Hondarribia.
Los ertzainas inspeccionaron su vehículo y hallaron en su interior tres garrafas de gasolina junto a una bombona de butano.
El detenido fue puesto a disposición de un juez, que ha ordenado que ingrese de nuevo en prisión.
