MADRID. De esta forma, ha negado que la Mesa Nacional de Herri Batasuna de la que formaba parte trabajara para la organización.
Así lo ha manifestado en la segunda sesión del juicio que se sigue contra 36 miembros de Batasuna por la presunta financiación de ETA a través de las 'herriko tabernas', unos hechos por los que se enfrentan a penas de entre 8 y 12 años de cárcel por delitos de pertenencia o colaboración con organización terrorista.
Etxebarria, al igual que los tres acusados que han comparecido con anterioridad, ha respondido solo a las preguntas de su defensa luciendo una pegatina colocada en su solapa en la que se podía leer la palabra 'Libre'. Todos ellos han asegurado que ni ellos ni las empresas, partidos o asociaciones en las que participaban tuvieran relación con ETA.
En concreto, Rufi Etxeberria, que se enfrenta a penas de 12 años de cárcel por estos hechos, ha negado rotundamente haber actuado como delegado de ETA en la Mesa Nacional de HB y ha añadido que las herriko tabernas no formaban un "área específica" del partido ni estaban adscritas a una entidad concreta, aunque aprovecharan sus locales.
Según ha recordado, fue militante de KAS hasta 1987, responsable de organización de Herri Batasuna un año después y reelegido componente de su Mesa Nacional en 1992 y 1995. No es "extraño" que le vieran entrando en las citas de la Mesa Nacional de Batasuna puesto que, aunque no fuera uno de sus integrantes, sí desempeñó tareas para el partido desde 2001 hasta 2002, cuando fue detenido.
"En absoluto colaboraba con ETA, no", ha respondido Etxeberria. "Nosotros siempre hemos funcionado por criterios propios. Hemos formado parte de una dirección política que ha debatido y decidido en todo momento", ha respondido al ser preguntado por su abogado Iñigo Iruin sobre si obedecían directrices de la organización terrorista.
POLÍTICOS O EMPRESARIOS AJENOS A ETA
La supuesta coordinadora de las herriko tabernas de Gipuzkoa Idoia Arbelaiz ha asegurado no haber tenido contacto con ETA y ha añadido que nadie le ha propuesto realizar actividades, seguir directrices o participar en reuniones con miembros de la organización terrorista.
Sí ha admitido haber tenido relación con HB-EH-Batasuna al haber sido concejal de HB desde 1995 hasta 1999 en Rentería. "Tenía una nómina, un contrato, estaba dada de alta en la Seguridad Social", ha indicado, para precisar que la formación política era "absolutamente" legal.
Eso sí, la acusada ha negado haber sido coordinadora de 'herrikos', para explicar que integraba la asociación Eustatza de Bilbao dedicada a organizar actividades culturales y gastronómicas, por lo cual mantenía contacto con estos establecimientos. "Enseñábamos a los camareros a hacer un buen café, a hacer cursos de cocina, pintxos, platos combinados...", ha ilustrado.
EL JUEZ: "NO ENTIENDO LA RISA"
Acto seguido, ha comparecido Vicente Enecotegi para negar que su empresa Eneko S.A. haya aportado dinero a ETA y mencionar que comercializaban productos de hostelería para todo tipo de clientes, desde herriko tabernas u otros bares o restaurantes, hasta batzokis del PNV, casas del pueblo del PSE o la misma Guardia Civil.
La mención al Instituto Armado ha desatado risas entre el público presente en la Sala, a lo cual el presidente del tribunal, Angel Hurtado, ha exclamado que la empresa podía prestar servicios a este Cuerpo o a la Policía Nacional. "No entiendo la risa", ha zanjado.
Enecotegi, cuya empresa el fiscal considera integrada en el proyecto financiero 'Udaletxe', ha recalcado que la compañía no tenía ningún matiz político y que se la "cargaron" con la intervención judicial decretada por Baltasar Garzón. Según ha añadido, intentó extender su negocio a Cuba o Brasil, aunque finalmente estas operaciones no llegaron a buen puerto.
El tercer acusado en declarar ha sido el integrante y tesorero de la Mesa Nacional de HB-EH-Batasuna, Jon Gorrotxategi, que ha rechazado igualmente haber pertenecido a ETA o haber recibido directrices de organizaciones satélites de la misma.
Su relación con las formaciones investigadas se debe a su militancia a mitad de la década de los 80 a Herri Batasuna, partido por el que fue concejal, procurador en las Juntas Generales, responsable de organización de Guipúzcoa y tesorero de su Mesa Nacional. Ha negado que las herriko tabernas financiasen o formaran parte del partido, el cual recibía ingresos de las instituciones o donaciones a título individual pero no de empresas.
El juicio continuará el próximo lunes con la declaración de Enrique Alaña y Patxi Bengoa y la decisión del tribunal sobre la prescripción del delito imputado a Josu Iraeta y José Antonio Egido. El exdirigente abertzale Joseba Permach será uno de los últimos en declarar.