LONDRES. En concreto, aseguran que en 2010 se produjeron 223.000 muertes por cáncer de pulmón en todo el mundo provocadas por la contaminación del aire, lo que hace que haya pasado formar parte del grupo 1 de factores de riesgo de cáncer que elabora este organismo.

Esta contaminación está causada en la mayoría de casos por el transporte y las emisiones industriales o agrícolas, y se sabe que aumenta el riesgo de una amplia gama de enfermedades, sobre todo respiratorias y cardiacas.

Además, los niveles de exposición han aumentado significativamente en algunas partes del mundo en los últimos años, sobre todo en aquellos países que han experimentado una rápida industrialización, caso de China.

"Ahora sabemos que la contaminación del aire no solo es un riesgo importante para la salud en general, sino también una causa ambiental de muerte por cáncer", según ha reconocido Kurt Straif, responsable de la IARC de elaborar la clasificación de agentes cancerígenos.

Tras una reunión con varios expertos que se han encargado de revisar la literatura científica más reciente, la IARC ha confirmado que tanto la contaminación del aire exterior y como las partículas que lo componen se puede clasificar como carcinógenos humanos (agentes que causan cáncer), al mismo nivel que otras sustancias como el amianto, el plutonio, el polvo de sílice, la radiación ultravioleta y el humo del tabaco.

Este grupo ya había evaluado en otras ocasiones muchos productos químicos y mezclas que se producen en la contaminación del aire exterior, como emisiones de motores diésel, solventes, metales y polvos, pero es la primera vez que clasifica la polución como causa de cáncer.

"Nuestra tarea fue evaluar el aire que respira todo el mundo, en lugar de centrarnos en los contaminantes específicos del aire", dijo Dana Loomis, directora adjunta de esta sección.

Así, han visto que el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón se incrementa significativamente en las personas expuestas a la contaminación del aire.

Aunque tanto la composición y los niveles de contaminación del aire pueden variar considerablemente de un lugar a otro, la IARC dijo que sus conclusiones se aplican a todas las regiones del mundo. De hecho, apuntan, esta clasificación es un paso importante para alertar a los gobiernos del peligro y del coste que puede ocasionar.