ISLAMABAD. En el ataque, que comenzó poco antes de la medianoche de ayer, escaparon al menos 30 insurgentes, de los que seis han sido detenidos, de acuerdo con declaraciones del comisario de Policía Mushtaq Jadoon recogidas por el canal Geo TV.

Las autoridades han impuesto el toque de queda en la zona y el Ejército ha enviado tropas para ayudar a contener la situación.

La Policía añadió que durante el asalto las fuerzas de seguridad acabaron con la vida de al menos cinco atacantes suicidas que estaban preparados para accionar cargas explosivas.

Los atacantes, cuyo número total no ha sido precisado por las autoridades, iniciaron su operación con una serie de fuertes explosiones en el centro penitenciario que dio paso a un intenso tiroteo, según fuentes policiales citadas por el diario Dawn.

Un portavoz de la principal agrupación talibán (TTP), Shahidulá Shahid, reivindicó en declaraciones al rotativo el ataque y detalló que en él tomaron parte un centenar de milicianos, entre ellos varios suicidas.

La prisión de Dera Ismail Khan, un edificio que data de la época de ocupación británica, alberga a cerca de 5.000 prisioneros, entre los cuales, según fuentes de inteligencia citadas por Dawn, hay cerca de medio centenar de cabecillas de los talibanes.

La localidad donde se produjo el ataque se halla al sur de la provincia noroccidental de Khyber-Pakhtunkhwa y muy cercana a la zona tribal de Waziristán del Sur, que a pesar de la acción del Ejército paquistaní, sigue siendo uno de los bastiones del TTP.

Dera Ismail Khan está también relativamente próxima al distrito de Bannu, donde hace poco más de un año una acción espectacular en la que los talibanes logró liberar a cerca de 400 reclusos, muchos de ellos insurgentes, de la prisión central de la zona.