BARCELONA. CiU y ERC trasladaron ayer al Congreso la polémica generada en Catalunya por un homenaje de la Guardia Civil a la División Azul, los voluntarios españoles que sirvieron al Ejército nazi alemán durante la Segunda Guerra Mundial. Además de exigir el cese de la delegada del Gobierno en Catalunya, María de los Llanos de Luna, por participar en el acto, exigieron explicaciones al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. CiU, ERC, PSC, ICV-EUiA y la CUP solicitaron el cese "inmediato" de la delegada del Gobierno en Catalunya. El portavoz de ERC en el Congreso, Alfred Bosch, pidió a través de un comunicado la "destitución fulminante" de De Luna. El dirigente argumentó que los hechos son motivo de escarnio todavía más grave si se tiene en cuenta "el uso banal del nazismo y del fascismo que se ha visto en los últimos días en boca de dirigentes populares".
"Mientras todos los estados conmemoran el fin del nazismo y lo condenan, actos como el denunciado hacen que el Estado español viva una situación vergonzosamente excepcional, sobre todo porque son miembros del Gobierno quienes les dan cobertura", lamentó Bosch. Por su parte, el PSC describió como "atentando contra la memoria democrática y la dignidad de las víctimas de la barbarie nazi" que De Luna entregase un diploma a la Hermandad de Combatientes de la División Azul.
En un comunicado, los socialistas catalanes exigieron que se aclaren las circunstancias que hicieron posible que este acto se produjese durante un homenaje a la Guardia Civil coincidiendo con los 169 años de su fundación, en un acto organizado en la sede de la Comandancia de Sant Andreu de la Barca, en Barcelona. En el acto también estaba el alcalde de Sant Andreu de la Barca, el socialista Enric Llorca, aunque el PSC asegura que "ni sabía ni pudo evitar" que se produjese la entrega de este reconocimiento a la División Azul.
También el diputado de ICV-EUiA en el Parlament Jaume Bosch consideró "inaceptable que la delegada del Gobierno del PP haga homenajes a excombatientes del ejército de Hitler", e instó al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, a cesar a De Luna si no dimite ella antes. En un comunicado, recordó que el Parlament catalán aprobó la comparecencia de la delegada del Gobierno ante esta Cámara pero todavía no se ha producido, por lo que reclamó que lo haga "de forma urgente" para dar explicaciones también sobre este hecho. Igualmente, en otro comunicado, la CUP catalogó como "un insulto al conjunto de la población catalana y a las víctimas del nazismo y de la violencia franquista" que la delegada del Gobierno español conserve su cargo.
La Guardia Civil -que organizaba el acto- defendió mediante una nota oficial que todas las asociaciones y hermandades que acudieron al acto de homenaje "están legal y debidamente reguladas e inscritas" en los organismos estatales o autonómicos correspondientes. En un comunicado, señaló que la idiosincrasia de estas asociaciones -fundamentalmente la de aquellas que hacen mención a unidades militares extintas- "se fundamentan en un contexto histórico, en absoluto ideológico".
El portavoz adjunto de los nacionalistas catalanes en el Congreso, Pere Macías, avanzó que CiU registraría una batería de preguntas en la Cámara Baja para conocer todos los detalles que rodean a este acto. A su juicio, la "gravedad" de esta situación debería llevar al Gobierno a apartarla de su cargo por "condecorar el franquismo integral". "No nos parece normal que alguien que está todo el día dando lecciones de Constitución ensalce valores anticonstitucionales --aseguró-. No es de recibo que quien represente al Gobierno español se abrace todo el día con franquistas".
Llanos de Luna estrecha la mano a un miembro de la Hermandad de la División Azul. Foto: semanario la directa
Todos los partidos catalanes, excepto PPC y Ciutadans, solicitan la destitución fulminante de Llanos de Luna
La Guardia Civil, que organizó el acto, afirma que albergó motivos "históricos y culturales" pero no ideológicos
En marcha el diseño del futuro Estado propio
El presidente del Consell Assessor per a la Transició Nacional de Catalunya, Carles Viver i Pi Sunyer, presentó junto al conseller de Presidencia, Francesc Homs, el plan de trabajo del Consell, que incluye la elaboración, en un año, de 19 informes sobre el proceso soberanista. Viver afirmó que la mayoría se centrarán en la estructura y relaciones exteriores que debería tener un futuro Estado propio. El Consell estudiará otras fórmulas de organización futura de Catalunya, como la federación, la confederación o la asociación de estados, pero se centrará en el Estado propio "porque es el escenario menos estudiado". Homs advirtió al Constitucional de que si suspende la creación del Consell por considerarlo vinculado a la declaración soberanista suspendida, el Govern seguirá adelante.
