MADRID. Durante la sesión de control al Ejecutivo, Rajoy ha respondido así a una pregunta planteada por la líder de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, quien le ha interrogado sobre si considera que su actuación al frente del Ejecutivo "tiene un pase" en comparación con los estándares democráticos de los países europeos y teniendo en cuenta la "opacidad" que acompaña todas sus actuaciones.
En concreto, Díez ha puesto en cuestión que el presidente sólo comparezca en el Congreso cuando tiene la obligación legal de hacerlo y que su grupo parlamentario vete todas las comparecencias de su Gobierno, al tiempo que ha censurado que gobierne por decreto ley y que sólo conteste a la prensa en reuniones con líderes extranjeros o cuando se encuentra fuera del país, o ni siquiera eso por que, según ha denunciado, no se ha podido conocer el contenido de su encuentro con el Papa. "Salvo que sea secreto de confesión, no consigo entenderlo", ha ironizado.
Pero, sobre todo, le ha echado en cara las reuniones secretas que mantiene "a diestro y siniestro", entre las que ha citado las que ha celebrado últimamente con Mas o Urkullu, sobre las que le ha pedido que confirme si conversó con ellos sobre financiación o sobre ETA porque, de ser así, ésos son asuntos de interés general sobre los que, según ha destacado, tiene la obligación de dar explicaciones.
'EL PAÍS NECESITA LIDERAZGO' "¿Cómo se puede liderar un país ocultándose a los ciudadanos y los medios de comunicación y despreciando al Parlamento especialmente en una situación de brutal crisis económica, política y social? --se ha preguntado--. Creo que este país necesita liderazgo, rumbo y recuperar confianza, y eso no se hace de la forma que usted asuma sus responsabilidades de Gobierno".
Frente a esto, Rajoy ha comenzado poniendo en valor las bondades de la Ley de Transparencia, sobre la que espera que los grupos del Congreso hagan "las aportaciones oportunas" durante su trámite parlamentario, tras lo cual ha pasado a defenderse de las acusaciones de la portavoz de la formación magenta.
Así, el presidente ha recordado que la semana pasada no sólo se sometió al control de la oposición en el Congreso y el Senado, sino que además compareció en el Pleno de la Cámara Baja para dar cuenta de las conclusiones del último Consejo Europeo, para justificar a renglón seguido las reuniones que mantiene con "mucha gente".
LA IMPORTANCIA DE LA DISCRECIÓN "Debo escuchar y hablar, y si alguien quiere tener una reunión discreta conmigo, yo la tengo. Hablo personalmente o por teléfono con muchos presidentes de comunidades autónomas porque, entre otras cosas, es mi obligación", ha argüido, antes de subrayar que "el sosiego, la tranquilidad y la discreción, en muchas ocasiones, son buenos consejeros, y no lo es tanto el exhibicionismo o la notoriedad".
En este punto, ha recalcado que todas las decisiones que hacen referencia a la financiación autonómica se adoptan en la Comisión Mixta en el caso del Concierto vasco o en el Consejo de Política Fiscal y Financiera en el caso del resto de las comunidades autonómicas.
Rajoy ha señalado que efectivamente habló con Mas y Urkullu, pero que también "con otros muchos presidentes" de comunidades autónomas. De hecho, ha revelado que este martes conversó con dos de ellos por teléfono. "Esto es algo que se produce de manera norma, ha ocurrido siempre y nunca a nadie se le ha ocurrido hacer este tipo de preguntas. Quizá usted debiera saber lo que es la discreción", le ha replicado.