gasteiz. Aunque los presupuestos del Gobierno Vasco están aún al pil-pil, el director general de Osakide tza, Jon Etxeberria, está contento por el esfuerzo que el Ejecutivo de Urkullu ha realizado en Asuntos Sociales y Sanidad. "Aunque el presupuesto en Salud se ha tocado ligeramente, pensamos que los dineros son suficientes para hacer una buena gestión que responda a las necesidades de la ciudadanía", dice contundente.
El consejero Jon Darpón asegura que en esta legislatura habrá que hacer lo mismo con menos presupuesto. ¿Cómo se puede conseguir esto: mayor eficacia, servicios más concentrados y mayor ajuste horario?
Llevamos mucho tiempo en la gestión sanitaria y, aunque hayamos tenido épocas de mejor situación económica y de mayor disponibilidad de recursos, estamos acostumbrados a trabajar siempre en la búsqueda de la eficiencia. Vamos a continuar en esta línea. Además, hay que recordar que el grueso del presupuesto está dirigido al personal, prácticamente estamos en el mismo importe que en el ejercicio anterior. El gran esfuerzo del Departamento se centra en recursos humanos. Por eso, nosotros les pedimos también a los profesionales de Osakidetza un pequeño sacrificio. Por otra parte, como siempre lo hemos hecho, vamos a continuar trabajando en la gestión de compras. Aquí es donde intentaremos reducir en un 5% que nos llevará al equilibrio presupuestario.
En cuanto a las infraestructuras. ¿Los hospitales y centros en marcha estarán en la fecha fijada? ¿Los programados se paralizarán?
En los últimos diez años Osakidetza ha invertido más de 800 millones de euros en infraestructuras y tecnología; es la fortaleza que tenemos. Tras la creación de Osakidetza, hace 30 años, esto fue posible gracias al desarrollo de nuestro autogobierno que nos ha permitido invertir no solo en edificios, sino también en recursos humanos y profesionales, Esta inversión no la ha podido hacer cualquier empresa. Esta vitalidad es la que nos permite abordar y responder mejor a la situación actual de restricción económica.
Se propone hacer más con menos. ¿Entonces antes había dispendio?
No. La eficiencia es hacer lo mismo con menos. O hacer más con lo mismo. La capacidad de mejora es constante; los humanos somos capaces de ir creando continuamente nuevas maneras de hacer las cosas; de innovar permanentemente. Con los mismos recursos, tenemos nuestra capacidad de organización, de desarrollar nuevas fórmulas y es en base a ellas en las que trabajamos. No hay que asustarse cuando decimos que hay menos dinero en Osakidetza. Por detrás hay una gestión que nos permite responder a las necesidades.
Puestos a reducir o a ajustar ¿Qué elegirán: infraestructuras, ambulatorios, servicios personal, horarios?
Las inversiones en edificios, que no solo son ladrillo sino también instalaciones, maquinaria, es donde los presupuestos se reducen en casi el 50%. Se hace en base a la fortaleza de las inversiones ya realizadas. Esto nos ofrece la posibilidad de que en un determinado año se pueda realizar un ajuste de estas características. En el resto de cuestiones, al igual que lo están haciendo muchas familias vascas afectadas por la crisis económicas, estamos pidiendo a los trabajadores un pequeño esfuerzo. Les demandamos un esfuerzo acorde se lleva en otros sector sociales vascos. Creemos que es algo exigible ya que el aumento de número de horas a trabajar al año tampoco es algo desmesurado.
Dentro de la CAV cree que Osakidetza mantiene un nivel de aceptación ante la ciudadanía elevado. ¿Esto es un reto, un estímulo?
Diría que Osakidetza es casi una parte de la sociedad. Hoy en día es uno de los rasgos que identifican a nuestra sociedad. Creo que tanto los ciudadanos como los profesionales que trabajamos en Osakidetza estamos muy orgullosos de la institución que tenemos, del servicio que ofrecemos. Evidentemente el reto es cómo hacemos para que esto se mantenga en esos altos niveles en una situación de crisis que nos está afectando a todos.
Desde fuera de Euskadi ¿Qué sensación cree que se tiene de Osakidetza: de cierta envidia porque aquí se paga bien a los proveedores, porque los servicios funcionan razonablemente bien, porque no habla de privatización...?
Hace un mes tuve una reunión con gerentes sanitarios de otras Comunidades Autónomas y comprobé que nos ven con cierta envidia. Nos estamos quedando como una isla dentro del Estado. Somos prácticamente el único Servicio de Salud que se mantiene con la idea de ser un servicio público, prestado públicamente, de calidad y abierto a toda la ciudadanía. En otros sitios del Estado están renunciando a estos principios. Sin embargo, en Euskadi es nuestra apuesta. Nos mantenemos fieles a esos principios porque creemos que podemos hacerlo.
En cuanto a los profesionales. En la primera mesa sectorial, los sindicatos dejaron claro su desacuerdo en casi todos los puntos. ¿Cuáles son los de máxima fricción?
El principal desacuerdo es el de las 35 horas. Es lógico que si pedimos trabajar unas horas más durante el año, algunas contrataciones se vean afectadas, pero muy lejos de las 5.000 y 9.000 que manejan los sindicatos. Se verán reducidas las contrataciones cortas, de varios días... Independientemente de las horas que pedimos que hagan, nosotros tenemos la responsabilidad de manejar los recursos públicos de la forma más eficiente posible, aunque algunos contratos se resientan, pero muy lejos de los que dicen las centrales.
Aplicarán el aumento impuesto por Madrid a 37,5 horas. ¿Merecerá la pena todo esto por el ahorro que se consiga?
Entendemos que sí. Es un pequeño esfuerzo que pedimos y que va a la par con la situación que la sociedad vasca vive en estos momentos. En épocas de bonanza fuimos nosotros -los que estamos ahora en el Gobierno Vasco- los que apostamos por reducir a 35 horas el horario de trabajo y aumentar las retribuciones por medio de la Carrera profesional. Ahora decimos que nos tenemos que adaptar a la situación actual; creemos que el esfuerzo que se demanda no es exagerado ni mucho menos.
Un aspecto fundamental serán los copagos farmacéuticos ¿Qué esperan del Tribunal Constitucional? ¿Es planteable una tasa en otros servicios como urgencias, hostelería?
El consejero de Salud lo ha repetido en numerosas ocasiones: estamos en contra del copago. Además, el copago es algo que existía de antes, cuando pagamos ese 40% de nuestras recetas. El Gobierno Vasco estamos en contra de esta tasa. De hecho, hemos presentado unos presupuestos en los que no se tiene en cuenta los posibles ingresos que pudiera generar el copago. Pensamos que traen más problemas administrativos que las aportaciones que nos pudieran dar. De momento, estamos a la espera de lo que diga la Justicia. Y cumpliremos lo que dicte. Pero no forma parte de nuestro plan implantar copagos.
En Euskadi se determinó atender a los inmigrantes con y sin papeles. ¿Se detecta un efecto llamada? ¿Lo seguirán manteniendo?
Sí. Estamos diciendo que el sistema es universal. Lo es para todos los ciudadanos que viven en Euskadi. Vamos en esta línea, y no hemos notado que se esté incrementando la actividad o las necesidades de servicio de ciudadanos extranjeros.
Todas las autonomías menos Navarra y la CAV han aceptado un calendario de vacunación único. ¿Lo mantendrán aunque cueste algo más?
Nosotros hemos defendido nuestra autonomía para poder establecer nuestro calendario. Tal y como hemos dicho vamos a continuar con el programa que tenemos. Apostamos por nuestro derecho a poder decidir ciertas cuestiones como el plan de vacunaciones que ha funcionado y funciona muy bien.
Se habla mucho de compras centralizadas. ¿A Osakidetza le conviene? ¿Se lo plantea hacerlas sistemáticamente con todas las CC.AA.?
Llevamos muchos años con la compra centralizada. En nuestros concursos no nos incorporamos a las adquisiciones del Ministerio, pero sí pedimos a los proveedores -se lo exigimos en contrato- que si las condiciones fueran mejores en algún otro sitio, como mínimo tendrán que ser las mismas para nosotros también. No nos estamos incorporando porque tenemos capacidad para poder manejarnos con nuestras formulas de gestión que, hasta ahora, nos están dando grandes resultados. Intentamos aprovechar nuestra situación; si pagamos bien sabemos que para el proveedor eso significa mucho y esa fortaleza que tenemos la hacemos valer a la hora de realizar los contratos. De momento, no nos planteamos entrar en compras que vayan más allá de nuestra Comunidad.
La población envejece, los polimedicados aumentan y los crónicos mucho más. ¿Mantendrán o modificarán el sistema actual de crónicos?
El sistema de crónicos es algo que se veía venir; se hablaba y se trabajaba en ello desde hace ya años. El planteamiento que se hizo la legislatura anterior nos parece correcto. Estamos en esa línea, pero lo que hace falta ahora es materializar el proyecto. La teoría la sabemos, pero lo que toca es llevar a cabo el proyecto. En este sentido, la integración de los servicios sanitarios será clave; que el paciente no distinga en qué nivel asistencial está; que no sepa si está en atención primaria o especializada. Trabajamos en esta línea y de cara al paciente y a los crónicos- que son la mayoría de nuestros usuarios- es una línea de actuación que dará buenos resultados.
Actualmente, la división entre los tratamientos en la atención primaria y la especializada es excesivo. ¿Tratarán de acercarlo más? ¿Cómo lo harán?
Es en esta línea es en la que estamos trabajando: en las organizaciones integradas donde la atención primaria y especializada dependan de un mismo equipo gestor. Eso hará que el tránsito de ese paciente que empieza con su médico general y que tiene que ir al especialista se pueda resolver mejor. Para ello es fundamental el sistema de información común en todas las áreas. Ese es el gran avance. Que el sistema de información de las dos áreas sea el mismo y sea sobre el que pivote toda la asistencia para que la continuidad de los cuidados sanitarios surja sola. Además estamos esforzándonos en que los profesionales trabajen juntos, que se conozcan, que se vean las caras... de este modo la comunicación será mejor y más fácil y contribuirá a la continuidad de los cuidados.