El Aaiún. El enviado especial del secretario general de la ONU para el Sahara Occidental, el estadounidense Christopher Ross, se reunió ayer en una cita histórica en El Aaiún con miembros del colectivo saharaui CODESA, quienes le trasmitieron "su inquietud por la situación de los derechos humanos" en la zona. No es la primera vez que un enviado especial de Naciones Unidas (ONU) para el Sahara Occidental viaja a El Aaiún, pero sí que es la primera vez en que se encuentra con los saharauis, invitados a la reunión como miembros de la sociedad civil. Esta es la cuarta gira que realiza Christopher Ross, que llegó el miércoles por la tarde a El Aaiún, por la zona después de que el reino alauí no lograra a mediados de este año que la ONU le relegara de su puesto tras retirarle los marroquíes su confianza.
Según explicó el vicepresidente del Colectivo de los Defensores Saharauis de Derechos Humanos (CODESA), Ali Salem Tamek, los participantes explicaron a Ross que "se siguen violando los derechos humanos en la región y continúan los casos de torturas en dependencias policiales". Tamek, que calificó la reunión de "un acto sin precedentes", agregó que se hizo hincapié en "la prohibición del derecho a manifestarse", y que reivindicaron "la liberación de los detenidos políticos saharauis y un mecanismo que controle la situación de los derechos humanos en la región". Los miembros del Comité de Derechos Humanos Saharaui presentaron ante la delegación de la ONU una amplia exposición sobre las violaciones de derechos humanos en el territorio cometidas por el Estado marroquí en el Sahara Occidental con decenas de certificados e informes completos y quejas que documentan estas violaciones.
Los miembros de la mesa también hablaron en su encuentro con Christopher Ross de docenas de informes anuales publicados por la asociación a fin de documentar estas prácticas inhumanas, que afectan en la libertad y existencia del ciudadano saharaui. Otros temas y dossiers fueron presentados como el del campamento Gdeim Izik -del que su desmantelamiento se cumplirán dos años el próximo jueves y que según las autoridades marroquíes dejó tras de sí 13 muertos, 11 de ellos de los cuerpos de seguridad del Estado-; los presos políticos detenidos durante los acontecimientos del campamento de protesta, el caso del preso político El Hafed Mohamed Yahya y las víctimas de las violaciones de derechos humanos dentro de los territorios ocupados.
En la reunión, que comenzó en las oficinas de la Misión de la ONU en el Sahara (Minurso) a las 9.00 hora local y duró más de una hora y media, participaron además del vicepresidente, la presidenta de CODESA, Aminatu Haidar, el abogado del colectivo, Labib Rguibi y Larbi Masud y Mohamed Motawakil, también miembros de la asociación.
El encuentro entre Ross y los representantes del independentismo saharaui (aunque oficialmente han sido invitados como miembros de la sociedad civil saharaui) cobra especial importancia, ya que se trata de la primera vez que un representante oficial de la ONU mantiene reuniones con ellos. La Minurso, creada en 1991 con el fin de supervisar el cese de hostilidades y organizar un referéndum de autodeterminación en el territorio, tampoco hasta ahora ha mantenido contactos con la sociedad civil saharaui, pese a los múltiples requerimientos que les han dirigido.
Tras la reunión con CODESA, Ross se reunió también con representantes de la Asociación de Víctimas de Violaciones Graves de Derechos Humanos (ASVDH), presidida por Brahim Dahan. Ross, que quiere implicar a actores civiles independientes para poder acercar posturas entre las partes en conflicto, llegó el miércoles por la tarde a El Aaiún, después de pasar cinco días en Rabat donde mantuvo contactos con representantes de las autoridades y miembros de la sociedad civil marroquí.
por la autodeterminación Una coordinadora de organizaciones independentistas convocó una manifestación en la céntrica Avenida Smara para reclamar el derecho de autodeterminación y que reunió a miles de personas y que se desarrolló bajo un importante despliegue policial. Y es que según denuncian los saharauis, "Marruecos ha desplazado muchos agentes de las fuerzas del orden y militares a la zona en los últimos días". El viaje de Ross a El Aaiún tiene lugar, además, a solo cinco días del aniversario de la Marcha Verde en Marruecos, fiesta nacional que rememora la entrada Hassan II con miles de marroquíes en el Sahara Occidental tras la salida de España de la que fuera su colonia. Christopher Ross ya se ha encontrado estos días con representantes de los principales partidos políticos marroquíes, el ministro de Asuntos Exteriores y fue recibido en audiencia por el monarca Mohamed VI. Según el portal marroquí Yabiladi, el monarca reiteró a Ross su compromiso de buscar una solución a este "conflicto artificial" y "en el marco de la proposición marroquí de autonomía".