Tokio/Pekín. Varias patrulleras de China entraron ayer en aguas de las islas que este país se disputa con Japón y provocaron una contundente protesta de Tokio, en el último roce de un conflicto que ha tensado seriamente las relaciones entre los dos vecinos asiáticos. China sostuvo que la decisión de patrullar las aguas que rodean el conflictivo archipiélago es "razonable y está totalmente justificada", después de que Tokio comprara este martes los terrenos de tres de los islotes que forman el disputado archipiélago ubicado en la región Asia-Pacífico. El Gobierno nipón, por su parte, calificó de "extremadamente lamentable" la "intrusión" y presentó una "contundente protesta" al embajador chino en la capital nipona, Cheng Yonghua, informó la agencia Kyodo.
Las patrulleras chinas de vigilancia entraron a primera hora de ayer en aguas territoriales de ese grupo de islas del Mar de China Oriental, conocidas como Senkaku en Japón, Diaoyu en China y Tiaoyutai por Taiwán, que también las reclama.
Según la Guardia Costera de Japón, uno de sus buques hizo una señal de advertencia a los barcos chinos, pero éstos respondieron alegando que estaban patrullando territorio chino y pidieron a su vez a los japoneses que abandonaran la zona.
Se trata de la primera vez que un número tan elevado de naves chinas entran al mismo tiempo en aguas de las islas en disputa, donde permanecieron cerca de siete horas antes de alejarse de la zona, según las autoridades niponas.
El primer ministro japonés, Yoshihiko Noda, aseguró que su Gobierno tomará "todas las medidas posibles" para garantizar la seguridad en torno a las islas deshabitadas, que se cree cuentan con ricos recursos minerales y están formalmente administradas por la provincia nipona de Okinawa.
Pekín, en cambio, mantiene que "la actual tensión entre China y Japón está causada completamente por Japón", según aseguró ayer el portavoz chino del Ministerio de Exteriores, Hong Lei, en rueda de prensa ordinaria.
"corregir" los actos Hong incidió en que el país nipón debe "volver a pensar sobre sus decisiones y corregir sus actos" para solucionar el conflicto a través de la vía de la negociación. El portavoz se negó a contestar si el envío de patrullas chinas a las aguas de esas islas empeorará la situación, si bien defendió que el Gobierno chino había actuado en relación a las circunstancias. "La parte china ha tomado medidas razonables y justificadas para defender la soberanía de su territorio y sus intereses", aseguró Hong.
En Tokio, el viceministro de Exteriores, Chikao Kawai, subrayó al embajador chino en tono más conciliador la importancia de que ambas partes "no pierdan la perspectiva" de sus relaciones y respondan "con calma", al tiempo que instó a Pekín a garantizar la seguridad de los ciudadanos nipones en China. El creciente enfrentamiento ha derivado en ligeras disputas entre ciudadanos chinos y los japoneses que se encuentran en el país vecino, según publican varios medios chinos. Frente a ello, Hong explicó ayer que "los chinos están profundamente decepcionados con el Gobierno japonés", si bien defendió que, a pesar de este sentimiento, "los ciudadanos japoneses son inocentes".