Vitoria. Cuatro meses después de que el seguidor del Athletic Iñigo Cabacas falleciera a consecuencia del impacto de una pelota de goma tras una intervención de la Er-tzaintza, las voces que clamaron justicia siguen vivas al no ver satisfechas sus demandas. Por primera vez desde aquel fatídico 9 de abril en el que Cabacas perdió su vida, una parte directamente implicada en el proceso señaló ayer que de existir un juicio éste no se celebrará hasta el próximo año.

El fiscal superior del Tribunal Superior del País Vasco, Juan Calparsoro, auguró el fin de la instrucción para antes de que concluya 2012, momento el que el Juzgado de Instrucción número 10 de la capital vizcaína que investiga el caso deberá determinar si ve indicios suficientes para imputar a uno o varios presuntos culpables y, en consecuencia, dar luz verde a la apertura de un juicio, o por el contrario, archivar el caso.

La posición de Calparsoro no deja lugar a dudas sobre su postura, según se desprende de las declaraciones que ayer realizó a Europa Press, en las que destacó que este caso "no puede quedar en nada" al considerar que "al margen del tema penal, está claro que aquí ha habido una muerte indebida, injusta".

Hasta el momento, el primer tramo de las pruebas testificales de forenses y testigos ha servido para conocer que la muerte del joven vizcaíno se debió al impacto de una pelota de goma en su cabeza en los incidentes tras el partido que enfrentó al Athletic con el Schalke 04 alemán. Asimismo, testigos presenciales desbarataron en gran medida la versión de los hechos ofrecida por el Departamento de Interior, negando la existencia de disturbios provocados por aficionados de grupos ultras.

Cuando culmine el periodo inhábil que supone agosto en este caso, el retorno de la jueza de instrucción a su puesto de trabajo permitirá continuar con las declaraciones de testigos -agentes de la Policía autónoma y ciudadanos presentes en el momento de los hechos- tanto por parte de la autoridad judicial como de la fiscal, una etapa cuyo final Calparsoro no se atrevió ayer a fijar con una fecha concreta pero que confió finalice antes de Navidad.

quejas del ararteko El caso Cabacas también figura entre las principales preocupaciones del Ararteko, Iñigo Lamarka, quien el martes afeó en una entrevista en Onda Vasca al Departamento del Interior por no haber recibido desde este área del Gabinete López el pertinente atestado policial.

Lamarka destacó que Interior respondió "tarde" a su demanda de información y le remitió únicamente la comparecencia del consejero en el Parlamento Vasco, una intervención en la que el Rodolfo Ares anunció que frenarían cualquier investigación al respecto hasta que el caso Cabacas culminase su paso por los tribunales.

Según Lamarka, el Ararteko no puede analizar si hubo un ilícito penal en este caso, pero indicó que constantemente demanda que todas las policías presenten y ejecuten "protocolos muy claros para fundamentar cualquier actuación policial, máxime si esa actuación hace uso de la fuerza".