KABUL. Ocho miembros de una familia afgana murieron el sábado en un ataque aéreo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en la provincia este de Paktia, informó Rohullah Samoon, portavoz del gobernador local. "Un hombre, su esposa y seis hijos murieron cuando su casa fue bombardeada en el distrito de Gard Siray", dijo Samoon, que indicó que no está claro cuál era el objetivo del ataque.

"Según nuestra información inicial, las tropas de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en Afganistán se vieron atacadas por un gran número de insurgentes en la tarde del sábado en la provincia de Paktia", dijo Martyn Crighton, portavoz de las fuerzas de la OTAN. "Las tropas sobre el terreno respondieron con fuego y solicitaron y recibieron apoyo aéreo".

Crighton señaló que fue una operación conjunta con una unidad del Ejército afgano y que no hubo bajas entre sus fuerzas. "En este momento, funcionarios de la ISAF están determinando si hay una correlación entre la operación de combate y la denuncia de las bajas civiles", señaló. "Intentamos evitar el daño a los civiles afganos y a la propiedad civil en todas nuestras operaciones. Y solo utilizamos la fuerza aérea si hay insurgentes en el área", señaló.

Ruhulá Samun, portavoz del gobierno regional, informó que el incidente ocurrió el sábado en la tarde, cuando un avión de la misión de la Alianza en Afganistán, la ISAF, lanzó un misil contra la casa de la familia, en la campaña de las fuerzas multinacionales contra la guerrilla taliban y la red insurgente de Haqqani, que opera en esa área.

La muerte de civiles en bombardeos u operativos de la OTAN es uno de los asuntos que más fricción crean entre las fuerzas internacionales y las autoridades afganas.

Las tropas internacionales desplegadas en Afganistán se encuentran inmersas en pleno proceso de retirada, que debe concluir en 2014, pese a que en el país continúan activos grupos insurgentes talibán, en lucha por implantar un régimen integrista islámico.

El año pasado murieron 3.021 civiles en Afganistán a causa del conflicto, la cifra más alta desde el inicio de la intervención de Estados Unidos en ese país en el 2001, según datos de las Naciones Unidas. La mayoría, el 77%, fallecieron a causa de la acción de los talibán y otros grupos insurgentes, y el 14% por las tropas internacionales. Se desconoce los responsables de la muerte del 9% de víctimas restantes.

Por otra parte, cuatro soldados de la misión de la Alianza Atlántica en Afganistán (ISAF) han muerto víctimas de la detonación de varios artefactos explosivos en diferentes puntos del sur del país, informó ayer la organización en un comunicado.