Bilbao. El proceso para el final de ETA va a recibir la próxima semana un fuerte impulso con la celebración de una Conferencia Internacional en la que participarán varios ex primer ministros y presidentes de diferentes países europeos. El cónclave del próximo lunes en Donostia ha sido auspiciado por varias fundaciones internacionales reconocidas en el ámbito de la mediación de procesos de pacificación y supone el cierre del ciclo iniciado con la Declaración de Bruselas. También ha contado con la implicación personal de destacadas personalidades del mundo empresarial vasco y de miembros del Partido Socialista francés radicados en Iparralde. El acto será presentado hoy ante los medios de comunicación de la mano de Paul Ríos (portavoz de Lokarri) Pierrez Hazan (miembro del Grupo Internacional de Contacto liderado por Brian Currin y colaborador de la comisión de las Naciones Unidas por los derechos humanos) y Jonathan Powell (ex jefe de gabinete del primer ministro británico Tony Blair). En el impulso de esta iniciativa han participado ex líderes de países europeos como el propio Blair, el ex primer ministro de Irlanda Bertie Ahern, así como ex mandatarios de países escandinavos y de otros lugares de Europa. Ya la semana pasada, el obispo emérito de Donostia, Juan María Uriarte, dejó caer durante una conferencia ofrecida en Bilbao y organizada por Sabino Arana Fundazioa, que el proceso para el final de ETA cuenta con un "consejo asesor de ex primeros ministros". Lo que no se vislumbró entonces, se entiende ahora a la luz de la presentación de la Conferencia Internacional.
Como adelantó este medio el pasado 8 de octubre, el cónclave servirá de aval internacional a las partes inmersas en el proceso y se produce días después de la reactivación provocada por la irrupción de la Comisión Internacional de Verificación tras la adhesión de los presos de ETA a la Declaración de Gernika. Precisamente, este grupo liderado por Ram Manikkalingam -vinculado a organismos del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas- ha propiciado la organización de esta Conferencia Internacional, junto con el Grupo de Brian Currin y otros facilitadores que han venido desarrollando su trabajo desde la Declaración de Bruselas.
Este documento firmado el 18 de septiembre de 2010 por veinte líderes internacionales daba la "bienvenida" a los pasos propuestos por la izquierda abertzale y a su "compromiso con los medios exclusivamente políticos y democráticos" y una "total ausencia de violencia" para conseguir sus objetivos políticos. A renglón seguido, hacía un llamamiento a ETA para que apoye este compromiso declarando un alto el fuego permanente y verificable. Y concluía añadiendo que "tal declaración, debidamente respondida por el Gobierno español, permitiría que los nuevos esfuerzos políticos y democráticos avancen, las diferencias sean resueltas y se alcance una paz duradera". El texto estaba suscrito entre otros por los premios Nobel de la Paz Desmond Tutu, Frederik de Klerk (expresidente de Sudáfrica) Betty Williams y John Hume, así como por Mary Robinson y Albert Reynolds, expresidenta y ex primer ministro de Irlanda, respectivamente.
LÓPEZ, DE VIAJE EN EE UU Las intensas gestiones en los últimos días en las embajadas y consulados extranjeros en Euskadi han prosperado para llevar a término la Conferencia Internacional en la que participarán de manera proactiva casi todos los principales partidos políticos vascos -incluidos de Navarra e Iparralde- así como otros agentes sociales y económicos. La celebración del encuentro internacional coincide con el viaje oficial que el lehendakari Patxi López realizará a Estados Unidos a partir del próximo jueves y hasta el 21 de octubre, por lo que el lehendakari, de no mediar un cambio de su agenda, no recibirá a los ex mandatarios europeos en su visita a Euskadi. Los oficios de anfitrión recaerán en uno de los dos representantes de Bildu al mando de la Diputación de Gipuzkoa o el Ayuntamiento de Donostia, de la que depende la Casa de la Paz, en el Palacio de Aiete. La Conferencia Internacional llega en un momento de muchos movimientos en torno a ETA, tras la adhesión del colectivo de presos de la banda al Acuerdo de Gernika, el último comunicado de la banda, el compromiso de Patxi López de acercar a los presos o la irrupción del Grupo de Amsterdam. Esta secuencia de pasos ha abierto un escenario diferente que ha provocado que los facilitadores hayan superado el escepticismo inicial especialmente respecto de ETA. Las posiciones entre el Gobierno español y la banda armada siguen estando en las antípodas, pero la brecha ya no es insalvable ya que, según ha podido saber este diario de fuentes solventes, los facilitadores del proceso han podido constatar que existen garantías suficientes por ambas partes para seguir adelante en el proceso.
La Conferencia Internacional del próximo lunes servirá de aval a las diferentes partes implicadas, pero también les asignará deberes en forma de emplazamientos públicos a los que deberán de dar respuesta. En este contexto adquiriría sentido y verosimilitud los rumores continuos sobre un inminente comunicado de ETA antes de las elecciones generales del próximo 20 de noviembre.