El líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, dejó ayer clara su obsesión por restablecer la unidad de los españoles y acabar con "los bandos y trincheras" de los últimos años, y por ello se comprometió a gobernar desde la verdad, la concordia y la valentía para cultivar "nuevas afinidades" y salir de la crisis. Esta obsesión por lanzar "un proyecto de recuperación" en el que "no sobre ningún español" estuvo presente en un discurso en el que, no obstante, no hubo una sola mención a ninguna de las propuestas que puedan ir en el programa electoral. Rajoy, además, invocó durante su discurso los ejemplos de Adolfo Súarez y de José María Aznar para salir de la crisis y afirmó con rotundidad: "Podemos volver a hacerlo".
madrid/málaga. El anuncio del PP de que incluirá en su programa electoral para los comicios generales del 20-N la instauración de la cadena perpetua revisable provocó ayer un rechazo prácticamente unánime del resto de partidos políticos y del Gobierno socialista, que consideró "retrógrada" la propuesta.
El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, criticó al PP por resucitar "a mes y medio" de las elecciones el debate sobre la cadena perpetua revisable, algo que, a su juicio, demuestra que "no es un partido conservador, sino retrógrado".
Caamaño hizo hincapié en que no hay "nada peor" contra el espíritu de la Constitución que la cadena perpetua porque es contraria al objetivo de reinserción de los reclusos, establecido en la Carta Magna. El titular de Justicia negó además que la cadena perpetua revisable exista en otros países, tal y como sostuvo el viernes el responsable de Justicia del PP, Federico Trillo.
En esta misma línea, el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, mostró su desacuerdo con la iniciativa del PP. "Tenemos otra visión porque creemos que la gente se puede recomponer, incluso cuando una persona ha delinquido", dijo.
También desde CiU, su portavoz en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, alertó de que la propuesta del PP tiene "difícil encaje" en la Constitución.
En declaraciones tras el Consell Nacional conjunto de CDC y UDC celebrado en Barcelona, Duran dijo ser "consciente" del "clamor popular" ante delitos graves y "repugnantes", pero dudó de la constitucionalidad de esta pena.
Frente a ello, el portavoz de CIU se mostró defensor del cumplimiento íntegro de las condenas que contempla el nuevo Código Penal e incluso a ampliar los años de prisión para determinados delitos.
También rechazó la iniciativa del PP el coordinador general de IU, Cayo Lara, que afirmó que no desea la cadena perpetua "ni siquiera para los de la Gürtel". Lara lamentó que el PP busque con esta propuesta "la parte más indigna" y "los sentimientos más indignos que puede tener el ser humano". "Es un problema de principios y de tener una sociedad civilizada, con penas que tienen que permitir la reinserción de la gente", subrayó el coordinador general de IU durante la Asamblea de la coalición. Fuera del ámbito político, Juan José Cortés, padre de Mari Luz, la niña asesinada en 2008, mostró su satisfacción y "alegría" por el anuncio del PP de dar luz verde a la cadena perpetua. "Me alegra mucho que el PP haya decidido incluirlo en su programa, considero que de esta forma se empieza a hacer Justicia a tanto esfuerzo y sacrificio", dijo Cortés, quien desde que su hija fuera asesinada ha emprendido una campaña de ámbito nacional, entre cuyas reivindicaciones se encuentra la instauración de esta pena.
propuesta del pp La prisión perpetua revisable fue una de las principales propuestas del PP en la tramitación de la reforma del Código Penal que entró en vigor el año pasado, aunque no fue incluida en la norma ante la oposición del PSOE. Según los datos del PP, la cadena perpetua revisable es apoyada por el 82% de la opinión pública y está presente en el ordenamiento jurídico de todos los países de la Unión Europea menos dos, uno de ellos España.