MADRID. En una entrevista con Europa Press, el ministro ha remarcado que los últimos "gestos" del diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, en la festividad de San Ignacio de Loyola y en el inicio de las fiestas de Vitoria, son "sectarios y partidistas". "No me gustan", ha afirmado.
Jáuregui ha insistido en que con sus actitudes, Garitano "representa sólo a su mundo y no a los guipuzcoanos" y "no cumple sus funciones institcionales". Después de aprovechar su presencia en la Basílica de Loyola para defender a los presos de ETA y pedir el fin de la dispersión, el diputado general invitó ayer a familiares de encarcelados de la banda a asistir desde la balconada del Ayuntamiento al comienzo de las fiestas de la capital alavesa.
Pero, además, el ministro ha recalcado que hay algo "peor" en sus comportamientos, que es "defender a los presos de ETA sin condenar a la violencia". Por eso, ha lanzado un mensaje claro a Garitano: "Si los gestos de Bildu con los presos de ETA no van acompañados del rechazo a la violencia, su mensaje y su discurso serán incompatibles con la democracia, y Bildu sabe muy bien cuáles son las consecuencias de eso".
Jáuregui ha recordado que el Ejecutivo trabajó con la "hipótesis" de que Bildu era una agrupación con "síntomas de conexión con partidos ilegalizados" y por eso se opuso a que pudiera concurrir a las elecciones municipales y autonómicas, aunque después el alto tribunal "interpretó otra cosa", en una lectura "plena de garantismo constitucional" y el Gobierno lo respeta.
A partir de aquí, ha asegurado que no le parece "particularmente signifcativo" que Bildu pueda volver a pisar el Congreso de los Diputados después de las elecciones del 20 de noviembre, porque "si ellos deciden participar en política y esa participación en la política es el abandono definitivo de la violencia" deben tener ese camino "abierto como los demás".
"BAJO LA LUPA"
No obstante, también ha dejado muy claro que también deben participar "como los demás", de manera que "si hay cualquier atisbo de juego con la violencia" por parte de Bildu, esta formación estaría "automáticamente sometida a la lupa de la revisión de su legalización", porque la ley permite a la Abogacía del Estado, a la Fiscalía General y al Gobierno de turno a "cuestionar esta legalidad".
En cualquier caso, sobre el futuro político de Bildu, ha asegurado que "por supuesto" no cree que vaya a convertirse en la fuerza política más votada en las próximas elecciones autonómicas en el País Vasco.
Mientras tanto, tampoco cree que el ex portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi vaya a encabezar una candidatura de la izquierda abertzale en próximos comicios, ya que está "imposibilitado" para ello. Jáuregui ha recordado que Otegi está en la cárcel y tiene todavía causas pendientes con la Justicia, por lo que no ha querido "especular" con si va a tener un futuro político.
"En estas elecciones no va a estar, ¿verdad?. Pues ya está, cuando lleguen las siguientes elecciones ya hablaremos, porque hay que esperar a sentencias, a la resolución de causas judiciales", ha recalcado.
"LOS PRESOS CUMPLIRÁN SUS PENAS"
Por otra parte, preguntado por cuál cree que debería ser la política penitenciaria en el caso de un final definitivo de la banda terrorista, Jáuregui ha defendido que los presos etarras "tienen que cumplir sus condenas y punto".
El ministro ha asegurado que no existe "ninguna variación" en la política antiterrorista ni penitenciaria ni en la colaboración policial. "Estamos manteniendo la firmeza, yo creo que con absoluta claridad", ha dicho.
No obstante, y aunque ha asegurado que el Gobierno quiere "mantener la unidad con todos los partidos políticos", también ha hecho un llamamiento para incorporar "un poco de inteligencia", para que pueda ser posible que "lo que es una expectativa de paz como nunca hemos tenido se convierta en definitiva e irreversible".