Vitoria, 15 jun (EFE).- Juan Antonio Zárate (PP) ha sido reelegido hoy presidente de las Juntas Generales (JJGG) de Álava, en una votación en la que se ha producido una sorpresa por el reparto de los demás puestos de la Mesa de la Cámara, en la que están todos los grupos.

La reelección de Zárate ha sido posible por la suma de los votos del PP y del PSE-EE y el voto en blanco de las dos procuradoras de Ezker Batua (EB).

El otro candidato a la Presidencia, Pedro Elosegi, del PNV, ha contado con los votos de su partido y los de Bildu.

La sorpresa ha saltado en la segunda votación, la de los vicepresidentes.

Se esperaba que el reparto de los puestos en la Mesa se correspondiera con la correlación de fuerzas resultantes en las elecciones, es decir, que el PNV ocupara la Vicepresidencia primera y Bildu o el PSE-EE la segunda.

La votación ha deparado la elección de la procuradora del PSE-EE Eva Jiménez como vicepresidenta primera, con 26 votos, y segundo Pedro Elosegi (PNV), con 25.

Al ser secretas las votaciones, mediante papeleta, la impresión era que PP, PSE-EE y una procuradora de EB habían votado a Jiménez, desbancando a Elosegui de la Vicepresidencia primera y teniéndose que contentar con la segunda, con los votos del PNV, Bildu y la otra juntera de EB.

Sin embargo, la procuradora de EB y candidata a diputada general, Nerea Gálvez, ha declarado a los medios de comunicación que tanto ella como su compañera habían votado para la Vicepresidencia primera al candidato del PNV, por lo que, entonces, algún procurador de este grupo o de Bildu habría dejado de apoyar a Elosegi.

Ramiro González (PNV) y Gorka Ortiz de Guinea (Bildu) han asegurado que los 13 y 11 procuradores de sus grupos respectivos habían votado al candidato nacionalista, con lo que la polémica volvía hacia EB.

Además, la recién estrenada portavoz socialista en la Cámara, Cristina González, ha asegurado que su grupo, el popular y EB habían cerrado un acuerdo para que se produjese el resultado que finalmente se ha dado en las votaciones y que no entendía las manifestaciones de Gálvez.

Esta situación ha provocado que el portavoz nacionalista, Ramiro González, pidiera públicamente un nuevo recuento de los votos, que se ha hecho hasta en cinco ocasiones y ha confirmado el resultado inicial.

Portavoces de todos los grupos han reconocido que lo ocurrido en la sesión de hoy no tiene por qué ser un preámbulo de lo que va a suceder en la investidura del diputado general, un proceso en el que las dos junteras de EB tienen también la última palabra para posibilitar que sea De Andrés (PP) o Xabier Agirre (PNV). EFE