BUENOS AIRES. La aeronave, de la línea aérea Sol, se precipitó en una zona inhóspita de la meseta patagónica, en la provincia de Río Negro.

"Lamentablemente podemos confirmar que no hay sobrevivientes", confirmó a medios locales Ismael Alí, director del hospital de Los Menucos, la localidad desde donde partieron las brigadas de rescate para llegar al sitio de la tragedia.

El responsable médico, que se desplazó al lugar del impacto, dijo al canal C5N que todo lo que ha quedado del avión "son pedazos carbonizado".

Las brigadas de rescate partieron desde Los Menucos (a 1.387 kilómetros al suroeste de Buenos Aires), a unos 35 kilómetros del paraje denominado Prahuaniyeu, en plena meseta de Somuncurá.

Un vecino de ese paraje, que transitaba por una ruta del lugar, fue quien dio alerta a la policía de Los Menucos, tras haber visto cómo una bola de fuego caía desde el cielo.

"Por lo que refiere el testigo, el avión explotó en el aire", señaló Alí, quien confirmó que el aparato, un avión Saab 340, con capacidad para 34 pasajeros, cayó a 700 metros de una vivienda particular.

El director del hospital de Los Menucos dijo que los restos de los cuerpos de los pasajeros y de la tripulación están carbonizados e indicó que en el lugar trabaja personal de bomberos, Defensa Civil y la policía.

"Lo que hemos visto son restos de todo tipo, pedazos pequeños y más grandes, pero todos carbonizados", señalo.

La empresa Sol informó en un comunicado que el vuelo 5428 cubría la ruta entre las ciudades de Córdoba (centro de Argentina), Mendoza (oeste), Neuquén (suroeste) y Comodoro Rivadavia (extremo sur).

El avión despegó desde Neuquén a las 20:08 hora local (23:08 GMT) del miércoles para cumplir el último tramo con destino a Comodoro Rivadavia.

A las 20:50 hora local (23:50 GMT) se estableció el ultimo contacto con la aeronave, desde la que informaron de que había una emergencia.

De acuerdo al comunicado, la nave partió con 18 pasajeros adultos, un menor de edad, dos pilotos y una azafata, cuyos nombres no han sido divulgados de momento.

Sol precisó que estaba previsto que el último tramo del viaje, hasta Comodoro Rivadavia, durase una hora y cincuenta minutos y que el aparato tenía combustible suficiente para tres horas y media de vuelo.

Un portavoz del Gobierno de Río Negro dijo a una emisora local que la aeronave habría enviado tres avisos de emergencia porque se le había congelado una de las alas.

Medios locales indicaron que el accidente se produjo por un fenómeno denominado "engelamiento", que se produce cuando se forma hielo sobre la superficie de la estructura del avión.

Sin embargo, Horacio Darré, director de Planeamiento de Sol, dijo a la prensa que "es imposible determinar las causas del accidente", que serán establecidas por una junta de investigación.

El directivo dijo que el avión salió sin problemas de Neuquén, con un plan de vuelo aprobado y condiciones climáticas operables.

Al ser preguntado sobre si el aparato sufrió "engelamiento", Darré aseguró que no podía confirmar esa información pues no contaba con el detalle de la ultima conversación entre el piloto y la torre de control.

La alcaldesa de Los Menucos, Mabel Yahuar, quien también confirmó que no hay sobrevivientes y que se desplazó hasta el lugar de la tragedia, dijo que el sitio ha sido cercado por la policía.

"Es una situación muy complicada, muy dolorosa. No hay sobrevivientes", indicó Yahuar, quien señalo que ya se dispuso la formación de un equipo médico y psicológico para cuando lleguen a esa localidad los familiares de las víctimas del accidente.