Vitoria. A falta de menos de una semana para que comience el plazo de inscripción de las candidaturas electorales, PNV y Hamaikabat siguen deshojando su particular margarita para concurrir de forma conjunta a las urnas. Las claras desavenencias en la propuesta global que los jeltzales pusieron sobre la mesa para los tres territorios no ha cuajado entre los miembros del partido surgido a raíz de la escisión de Eusko Alkartasuna, pero la nueva receta parece atisbar el fin del túnel discrepante. Según ha podido saber DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, frente a la brecha vigente en Bizkaia y Gipuzkoa, la consecución de un acuerdo en Álava parece cuestión de días, aunque estas mismas fuentes matizan que aún quedan elementos por resolver.

El propio presidente del Euzkadi Buru Batzar, Iñigo Urkullu, mostraba ayer su optimismo para lograr avances en la conjunción de intereses de ambas formaciones, aunque manifestaba sus dudas sobre si el pacto será "en el ámbito nacional o territorial". La matización del líder jeltzale no es baladí y fija al territorio alavés en la diana, donde a diferencia del resto de Euskadi siempre se han mantenido vivas las conversaciones entre ambas partes.

A raíz de estos encuentros, el PNV lanzó una propuesta a sus interlocutores que, según ha podido saber este periódico, obtuvo el plácet de los responsables de la negociación por parte de Hamaikabat, a pesar de que el contenido de este acuerdo dejaba ciertos flecos sin resolver sobre cuál debe ser el comportamiento de ambos partidos en los municipios donde no fructifique esta alianza.

Así las cosas, las delegaciones de PNV y el partido liderado por Iñaki Galdos se esmeran en poner negro sobre blanco en los polémicos epígrafes para cerrar cuanto antes su colaboración electoral.

Voluntad común de acuerdo De puertas hacia afuera, tanto los dirigentes del PNV como los de Hamaikabat manifiestan su voluntad de acuerdo y sitúan la pelota en el tejado de su interlocutor a la hora de responder por qué todavía no ha llegado esta concordancia en las intenciones a buen puerto. En este sentido, ambas partes separan la falta de acuerdo en Gipuzkoa -teórica plaza fuerta de Hamaikabat- de la situación alavesa, donde los compañeros de partido de Galdos observan una "sensibilidad distinta" y reiteran su deseo de concurrir de forma conjunta para no "echar las Juntas Generales a manos de otros", en clara alusión al escaso margen de apoyos que separa a los tres principales partidos en este territorio.

El PNV ya ha anunciado el orden de los integrantes que acompañarán a Xabier Agirre en su plancha foral, por lo que falta por saber quién y en qué puesto figurará en este listado en caso de que el acuerdo se complete, así como qué cuota presencial tendrá Hamaikabat en los municipios alaveses, dudas que no afectan a uno de los principales enclaves del territorio como es Agurain, donde el histórico alcalde Iñaki Beraza es una apuesta segura para liderar la lista ante las urnas ya sea en solitario o en una plancha conjunta con el PNV.

Por otro lado, en Hamaikabat no han encajado bien los discursos que desde la cúpula jeltzale han puesto en entredicho "con desprecio" el apoyo social de este nuevo partido.