MADRID. El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, ha aclarado que la enmienda introducida por su formación y CiU al proyecto de Ley de Economía Sostenible (LES) que abre la puerta a que las centrales nucleares puedan seguir operando más allá de 40 años si sus titulares así lo solicitan excluye explícitamente a la central de Santa María de Garoña (Burgos).

En declaraciones a los periodistas antes de asistir a la Junta de Portavoces de la Cámara Baja, Erkoreka ha afirmado que esta medida permite dar claridad a la "totalmente indefinida política energética del Gobierno", tal y como reclamaban la sociedad y el propio sector energético, al tiempo que consolida la incorporación de la energía nuclear en el mix energético a futuro.

En este sentido, ha asegurado que la modificación, que esta tarde ratificará el Pleno del Senado, cuenta con un consenso "nada desdeñable" y responde a los acuerdos alcanzados en el marco de la Subcomisión de Estrategia Energética a finales de 2010, aunque aún quedan "otras decisiones que incorporar al ordenamiento jurídico.

ERC VE RAZONABLES LOS 40 AÑOS

Sin embargo, otras formaciones ya han adelantado su rechazo a la norma. Entre ellas, ERC, cuyo portavoz parlamentario, Joan Ridao, ha calificado la enmienda de "regresión que favorece al lobby eléctrico".

"Nos preocupa y no estamos de acuerdo", ha afirmado Ridao, quien ha asegurado que el horizonte de 40 años era "razonable" y suponía un "estímulo para las energías renovables como alternativas" a la nuclear, que, a su juicio, presente "todo tipo de inconvenientes" en terreno ecológico y de salud.