MADRID. La incidencia de la gripe ha aumentado por tercera semana consecutiva a 208,69 casos por 100.000 habitantes, si bien se observa una disminución en la pendiente de ascenso de la onda epidémica que revela una evolución estable o decreciente.
Así se desprende del último Boletín del Sistema de Vigilancia de la Gripe, que elabora el Instituto de Salud Carlos III, correspondiente a la semana del 2 al 8 de enero.
La actividad gripal se asocia a la circulación predominante del virus de la gripe A, que aparece en el 95% de los pacientes. Los menores de 15 años, especialmente el grupo de 0-4, siguen siendo los más afectados, y destaca el continuado incremento en las tasas de incidencia de este virus en el grupo de 15 a 64 años.
Desde el inicio de la temporada 2010-2011 se han notificado 350 enfermos graves hospitalizados confirmados de gripe, correspondiendo el 87,4% a infecciones por virus A H1N1.
El 16% de los afectados no presentaba ningún factor de riesgo y el 83,5% de los casos incluidos en los grupos recomendados de inmunización antigripal no habían recibido la vacuna de esta temporada.
En cuanto a la mortalidad derivada de este virus, 16 de los enfermos han fallecido, el 93% con factores de riesgo. El 90% de las defunciones, dentro de los grupos recomendados de vacunación, no habían recibido el tratamiento de esta temporada.
En todas las redes de vigilancia de España se ha superado el umbral basal establecido para la temporada 2010-2011 en esta primera semana del año, exceptuando Ceuta y Melilla que continúan con un nivel de intensidad bajo.