vitoria. El Gobierno Vasco va a impulsar medidas de refuerzo de la lectura para tratar de crear nuevos hábitos en el alumnado. Así lo ha concretado en el nuevo currículum vasco de Educación Básica, que establece que las escuelas dediquen al menos media hora al día a que sus alumnos lean libros.
El Ejecutivo autonómico recoge de esta manera una vieja reivindicación de la comunidad escolar, pero especialmente de los padres, si bien es cierto que la falta de hábitos de lectura en los más pequeños tiene mucho que ver con la escasa cantidad de adultos que conserva esta afición. Sin ir más lejos, más del 64% declara que lee menos de un libro al trimestre.
En cualquier caso, tanto el Consejo Escolar de Euskadi, órgano de máxima representación de los centros, como Ehige, que agrupa a las familias, han recibido con agrado la noticia sobre el impulso que se pretende dar a la literatura en las aulas. Desde este último colectivo, su portavoz, Imanol Zubizarreta, insiste en que el alumnado presenta "demasiadas carencias" en el ámbito de la lectura, por lo que considera oportuno llevar a la práctica estas medidas en el plazo más breve posible. En este sentido, abogan por que se haga un planteamiento "transversal", de forma que la literatura esté presente en todas las asignaturas. "No se trata de establecer una hora a la semana de lectura, sino que a través de ella se pueda aprender matemáticas, por ejemplo", añade.
La preocupación entre colegios e institutos por el escaso interés que los escolares muestran hacia la lectura es evidente. En Ekialde, por ejemplo, se atreven a afirmar que "no hay hábitos" entre el alumnado, y que los que disfrutan con un libro son, tristemente, "una excepción". "Cuando entran en la biblioteca directamente se sientan en el ordenador para navegar por Internet; no demuestran ningún interés", asegura Uxune Aizpurua, profesora de Lengua y encargada de la biblioteca de este instituto gasteiztarra. En este sentido, han detectado que entre los pocos que muestran cierto apego a los libros, prefieren los géneros de terror y aventura, y sobre todo los cómics.
El nuevo currículum escolar, que propone a partir de ahora medidas de refuerzo de la lectura en las aulas, no hace más que cumplir lo que establece la LOE, que insiste en la necesidad de avanzar en este aspecto tras recoger las aportaciones que han ido realizando los distintos agentes educativos. Dicha normativa, de obligado cumplimiento, pero cuyo desarrollo corresponde a las distintas comunidades autónomas, establece que los profesores deberán dedicar un tiempo a la lectura en todas las asignaturas de la Educación Obligatoria con el fin de promover este hábito en los alumnos.
Así, el área que dirige Isabel Celaá también se ha puesto manos a la obra en este aspecto por considerar "que la lectura constituye un factor primordial para el desarrollo de las competencias básicas y la consolidación de la competencia comunicativa". Por ello, establece que los centros que impartan Primaria, al organizar la práctica docente, "deberán garantizar" la incorporación de un tiempo diario de lectura a lo largo de todos los cursos de la etapa, que no podrá ser inferior a los 30 minutos. Además, añade que el tiempo que se dedique a esta actividad deberá tocar las distintas materias que se imparten en la escuela. Así, por ejemplo, en matemáticas se podría leer un libro de astronomía, en música la historia de los Beatles o un texto sobre la vida de Mozart, y en deportes, por qué no, biografías de Di Stefano o Pelé.