PAMPLONA. Los representantes de la izquierda abertzale Xanti Kiroga y Txelui Moreno han afirmado hoy no compartir el "nerviosismo" de otras formaciones de cerrar cuanto antes "fórmulas electorales" para 2011, aunque han reconocido que también es una cuestión importante. El portavoz de ilegalizada Batasuna reiteró que el "proceso democrático" propuesto en el documento 'Zutik Euskal Herria' se tiene que desarrollar "sin violencia" y se preguntó "si el Estado acepta eso".
Al cumplirse una semana de la presentación de la declaración "Zutik Euskal Herria", Kiroga y Moreno han hecho un balance de las reacciones políticas que ha despertado el documento, que a su juicio ha obligado a "retratarse" a todas las formaciones.
Estas reacciones, ha comentado Moreno, "han dejado claras" dos cuestiones: el "nerviosismo" que se refleja en algunas fuerzas políticas y la "esperanza e ilusión" que ha despertado en otras.
En el bloque "progresista y abertzale", ha apuntado, ha habido un reconocimiento de "la magnitud y el calado" del contenido del documento, por lo que ha pedido a estas formaciones que "actúen con altura de miras".
Moreno ha destacado que la izquierda abertzale ha querido "aislarse" para realizar este debate interno y ahora, ha dicho, es el momento de empezar los contactos con otras formaciones, aunque ha insistido en que la prioridad no son los acuerdos electorales, ya que su planteamiento tiene "un calado más estratégico", que es sentar las bases para "el reconocimiento de nuestro pueblo".
Una actitud muy distinta ha apreciado la izquierda abertzale en el resto de formaciones y en este sentido, al ser preguntado por las críticas recibidas por la ausencia de referencias a ETA en el documento, Moreno ha declarado que ése ha sido "el guión establecido por el Ministerio del Interior".
"Todo el mundo habla de una violencia", ha destacado Moreno, quien ha matizado que hay "otras violencias" y ha denunciado en concreto la existencia de tortura o el régimen de incomunicación.
La izquierda abertzale, ha agregado su portavoz, ha expresado "en negro sobre blanco" su apuesta por un proceso en el que no haya ningún tipo de violencia y al respecto Moreno ha preguntado al Gobierno español si, como han hecho ellos en el documento, acepta los llamados "Principios Mitchell" de resolución de conflictos.
Se trata, ha subrayado, de "un modelo de resolución de conflictos aceptado internacionalmente", que deja en manos de los ciudadanos la elección democrática entre "todos los proyectos puestos encima de la mesa", pero el Gobierno español, ha subrayado, aún no se ha pronunciado al respecto.
Moreno ha comentado que, en formaciones como UPN, PP y PSN, su documento ha encontrado "la misma reacción defensiva que se dio con el acuerdo de Lizarra o el último proceso negociador", ya que estos partidos "perciben con nitidez que hay posibilidades reales de cambio de modelo mucho más allá de lo que es la alternancia de siglas propuesta hasta ahora".
Al respecto, ha destacado que los pactos UPN-PSN en Navarra o PSE-PP en la Comunidad Autónoma Vasca "confieren a Euskal Herria rango de cuestión de Estado", aunque a pesar de ello o precisamente por ello, ha aseverado, "las posibilidades de lograr un cambio político y social en nuestra comunidad se perciben hoy más reales que nunca".
El portavoz de la izquierda abertzale ha manifestado que tanto UPN como el PSN deben aceptar que "el proceso democrático tiene que darse en ausencia de toda violencia y de injerencia externa, respetando todos los proyectos políticos, incluido el independentista, y aceptando que, si la mayoría de la población democráticamente elige esta última opción, ésta se va a poder materializar, porque eso es democracia".
En otros partidos como IU o Batzarre, la izquierda abertzale ha percibido según Moreno "un temor a perder el espacio que tienen", porque "la articulación de lo que es el espacio progresista y abertzale de Navarra a favor del cambio político y social los deja fuera de juego".
Moreno ha anunciado por último que la izquierda abertzale está elaborando un diagnóstico sobre la situación política, económica y social de Navarra que se presentará dentro de dos o tres semanas.