El presidente de EE.UU., BarackObama, que recibió hoy el premio Nobel de la Paz, aprovechó su discursono sólo para defender las guerras de su país, sino también para rendirhomenaje a uno de sus héroes, Martin Luther King.

Obama, que salpicó su discurso de acontecimientos históricos -y que ensu defensa de una guerra justa se hizo eco de un problema filosóficoque ya abordaron Aristóteles y San Agustín- aludió a varios de lospremiados anteriormente con el galardón para admitir que frente avarios de sus predecesores sus logros "son escasos".

Específicamente mencionó al ex presidente sudafricano Nelson Mandela oel médico Albert Schweitzer, a los que describió como "gigantes de lahistoria".

También se refirió a George Marshall, el diplomático creador del planque lleva su nombre y que permitió la reconstrucción de Europa tras laII Guerra Mundial, o a la "tranquila dignidad" de la disidente birmanaAun Sang Suu Kyi.

Pero el nombre más repetido a lo largo de todo su discurso fue el deldefensor de los derechos humanos para los negros, Martin Luther King,uno de los héroes en los que Obama ha buscado más inspiración y querecibió en 1964 el galardón hoy concedido al mandatario de EstadosUnidos.

Hasta seis veces el presidente estadounidense mencionó el nombre de King, al que citó directamente en dos ocasiones.

Obama describió su presencia en el Auditorio Municipal de Oslo pararecibir el premio Nobel como "una consecuencia directa del trabajo detoda la vida" del defensor de los derechos, del que resaltó "la fuerzamoral de la no violencia".

"Sé que no hay nada débil, nada pasivo ni nada ingenuo en las creenciasy en las vidas de (el líder de la independencia india, Mohandas) Gandhiy King", señaló.

El presidente retomó la idea al final de su discurso al señalar que "lano violencia practicada por hombres como Gandhi o King puede no habersido práctica o posible en cada circunstancia, pero el amor quepredicaron, su fe en el progreso humano, debe de ser la estrella polarque nos guíe en nuestro camino".

Además de sus predecesores en el Nobel -y a Gandhi, uno de losprincipales símbolos del movimiento por la no violencia en el sigloXX-, Obama rindió homenaje también a otros que no lo han recibido.

Mencionó así la "valentía de los zimabuos que acuden a votar mientrasencaran palizas" y a los "cientos de miles que han desfilado ensilencio por las calles de Irán".

"Hay hombres y mujeres en todo el mundo que han sido encarcelados ygolpeados en su búsqueda de la justicia; los que echan el resto enorganizaciones humanitarias para aliviar el sufrimiento; los millonessin reconocimiento cuyos actos callados de valentía y compasióninspiran a los cínicos más endurecidos", recordó.

"No puedo discutir", señaló, "con los que encuentran que esos hombres ymujeres -algunos famosos, otros sólo conocidos para aquellos a los queayudan- merecen más este honor que yo". EFE