arrecife. La activista saharaui, Aminetu Haidar, que prosigue con la huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote dejó ayer claro que no quiere recibir ningún tipo de asistencia sanitaria después de que una comisión judicial acudiera al aeropuerto para comprobar su estado de salud. La pacifista rechazó ser atendida por cualquier médico, ni siquiera por Martín de Guzmán, quien de forma voluntaria la ha estado visitando desde el inicio de su protesta.
Por su parte, el juez de Arrecife, Jerónimo Alonso, rechazó también la hospitalización de Haidar e, incluso, someterla a tratamiento médico en contra de su voluntad, como querían hacerlo desde Exteriores.
"El juez me ha empujado a tomar la decisión de renunciar a toda atención médica", explicó Haidar en un comunicado justo después de que se anunciara que el juez tenía previsto mandar a otro médico para comprobar su estado, ya que hay informes contradictorios sobre los efectos en su salud de la huelga de hambre.
Con todo, el juez de Arrecife acordó "no haber lugar al traslado forzoso de Aminetu Haidar a un centro hospitalario para que se valore su estado de salud o para que sea sometida a tratamiento médico contra su voluntad."
Entre tanto, jueces y fiscales de la Audiencia Nacional coinciden en que la activista podría ser alimentada de manera forzosa cuando pierda la consciencia, si bien reconocen que no hay ningún precedente equiparable al de Haidar, que no está en situación de dependencia del Estado ni bajo otro tipo de tutela al ser mayor de edad. Las autoridades marroquíes aprovecharon su visita de ayer a Bruselas para esgrimir su cooperación con la Unión Europea en materia de inmigración y de lucha contra la inseguridad como amenaza ante las peticiones y presiones para que acepte acoger a la activista saharaui. Mientras, desde Marruecos no dudan en jactarse del "fiasco" que ha supuesto la huelga de hambre de Haidar para Argelia y Frente Polisario, que esperaban el apoyo de España.
El ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Taib Fassi Fihri, acusó ayer a Haidar de ser la causante de su situación y de no ser una defensora de los Derechos Humanos, sino una miembro del Frente Polisario. Además, preguntó a España con qué Marruecos quiere construir el futuro, si con el que coopera en materia de inmigración y para combatir la inseguridad o con el que "no quiere ni Magreb ni Europa".
"Hace años que se construye pacientemente esta relación en el sentido del interés recíproco y hemos hecho mucho. Es a esta España a la que me dirijo", agregó el ministro en declaraciones a la prensa en Bruselas, adonde viajó para participar en las octava ronda del consejo de asociación UE-Marruecos.
Así, recordó que España y Marruecos han hecho "mucho" por construir el futuro y que "cuando hay inmigración es con nosotros con quien habla, no con nadie más" o "cuando hay problemas de inseguridad o perspectivas de inversión". "¿Es con ese Marruecos con el que ustedes deben construir el futuro o bien con el que no quiere Magreb y no quiere Europa?", recalcó Fassi Fhiri.
Mientras, en nombre de la UE, la comisaria de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, manifestó su confianza en que Marruecos y España encuentren una solución para Haidar, si bien admitió que se trata de un tema "bilateral" en el que la Unión Europea no intervendrá.
las gestiones del gobierno El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, pidió ayer a los portavoces de los grupos parlamentarios del Congreso que apoyen una proposición no de ley que va a redactar el Grupo Socialista pidiendo a la activista saharaui que cese la huelga de hambre y continúe su lucha política por otros medios y a Marruecos que "asuma sus responsabilidades".
Para recabar el apoyo de todos los grupos ante esta iniciativa, Moratinos convocó en la mañana de ayer a los portavoces en la Cámara Baja, quienes se mostraron dispuestos a estudiar la propuesta, pero reclamaron que se les haga llegar un texto concreto antes de decidir su postura. Un texto que el PSOE les hizo llegar a todos los grupos en esa misma tarde.
El borrador, que manifiesta la "preocupación" del Congreso de los Diputados por la salud de Haidar y expresa el deseo de que pueda continuar su trayectoria en defensa de sus ideales, insta al Gobierno a que "redoble" los esfuerzos ante Marruecos para que, "en el marco de sus obligaciones internacionales, éste se "implique" en la solución de una situación "insostenible".
